Está siendo utilizada por primera vez en Brasil una técnica de enderezamiento de un edificio utilizando la transferencia de carga de los pilares para puntales más profundos por medio de gatos hidráulicos. La recuperación se realiza en Santos, en el edificio Nuncio Malzoni, de 17 pisos, construido en 1967. Éste posee una inclinación de un 4% (la famosa Torre de Piza, en Italia, tiene un 8%) provocada por recalques (descenso) de la capa de arcilla marina existente en el suelo de la costanera santista que ya compromete a 98 edificios. El proyecto de la obra es de los profesores Carlos Eduardo Maffei, Heloísa Helena Gonçalves y Paulo Pimenta, del Departamento de Ingeniería de Estructuras y Fundaciones de la Escuela Politécnica de la Universidad de São Paulo (USP). “Fueron colocados puntales de hormigón junto al edifico que llegan a una profundidad de 56 metros. El peso transmitido por los pilares originales está siendo transferido por los gatos a los puntales por medio de vigas de transición que ocupan el la planta baja del edificio”, explica Maffei. Como comparación, la profundidad de algunas estaciones del metro paulistano como São Bento y República no pasan de los 34 metros de profundidad. Con una velocidad de cerca de un centímetro por día, Maffei espera que el edificio Nuncio Malzoni este recto en dos meses. El costo de la obra es de 1,5 millones de reales, 90 mil por departamento.
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