LIVIA FIORAVANTIEn marzo, geólogos de la Universidad de Brasilia (UnB) y de las universidades de São Paulo y de los estados del nordeste del país llevaron a cabo la segunda etapa de los ensayos de campo destinados a medir el espesor de la corteza terrestre –la capa externa de la superficie terrestre– en la denominada provincia de Borborema, conformada por los ocho estados del nordeste. Allí, principalmente en Río Grande do Norte y en Ceará, los temblores de tierra son intensos. Este estudio es producto de un trabajo de medición de la estructura de la corteza que comenzó hace 12 años en Chapada dos Veadeiros, en Goiás, utilizando la misma técnica (refracción sísmica profunda). El espesor de la corteza varía entre 5 y 70 kilómetros. En la meseta, mide alrededor de 44 kilómetros. Porangatu, en el norte de Goiás, es el sitio donde la corteza es más delgada: 36 kilómetros. Ese estudio, coordinado por José Soares y Reinhardt Fuck, ambos de la UnB, profundiza, literalmente, el conocimiento sobre el centro-oeste, anteriormente conocido solamente hasta 5 kilómetros debajo de la superficie, y advierte acerca de las áreas más propensas a los temblores de tierra. En el centro-oeste son muy frecuentes los temblores de baja intensidad.
