Los espacios vacíos en las estructuras redondeadas de la próstata conocidas con el nombre de ácinos representan un indicio de la gravedad de los tumores en esa glándula de los varones, y no un fenómeno indeseable e irrelevante que aparece cuando se realiza una biopsia. Cuanto mayor sea el espacio, más peligroso es el tumor, según un estudio de Wagner Fávaro, Athanase Billis y otros investigadores de la Universidad Estadual de Campinas (Unicamp). Ellos examinaron dos grupos de muestras: 25 de hombres que habían muerto sin enfermedad en el aparato urogenital y 25 de hombres sometidos a una extirpación total de la próstata. El estudio indicó alteraciones moleculares y celulares asociadas con la formación de espacio en esas estructuras de la próstata (Pathology & Oncology Research, abril de 2012). En la misma edición de la revista, investigadores de la Universidad de Zagreb, en Croacia, arribaron a la misma conclusión: la formación de espacios vacíos en los ácinos puede tomarse como un fenómeno útil para evaluar la gravedad de los tumores. El cáncer de próstata se diagnostica mediante un tacto y por las variaciones en los niveles de antígeno prostático específico (PSA) y por la forma, organización y cantidad de los ácinos, que producen secreciones que contribuyen a formar el semen.
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