Imprimir Republish

Salud

Cautela con antibióticos y antiácidos

Quien tiene un hijo pequeño sabe que las infecciones y el reflujo gastroesofágico son problemas frecuentes, tratados, respectivamente, con antibióticos y reductores de la acidez del estómago. Incluso cuando se las receta adecuadamente, estas medicaciones pueden cobrar un precio más adelante: el desarrollo de alergias. Investigadores de la Universidad de Ciencias de la Salud Uniformed Services y del Centro Médico del Ejército Dwight D. Eisenhower en Estados Unidos analizaron los datos de 792 mil niños nacidos entre 2001 y 2013 y comprobaron que aquéllos tratados con antibióticos o reguladores de la acidez durante los seis primeros los meses de vida se vuelven más propensos a desarrollar alergias. Una pequeña proporción de los niños (3%) tenía alergia a los alimentos. Este número, sin embargo, fue hasta dos veces mayor entre aquéllos que habían tomado reductores de acidez del estómago. Los niños tratados con antibióticos presentaron el doble del riesgo de tener asma y rinitis alérgica que aquéllos que no tomaron estos medicamentos (JAMA Pediatrics, 2 de abril). Para los investigadores, estos medicamentos pueden alterar la microbiota y sólo debe administrárselos “si el beneficio clínico es claro”.

Republicar