Fabricar suplementos alimenticios con fines terapéuticos para animales. Tal el objetivo de Microbiol Comércio e Indústria de Alimentos, una empresa bahiana con sede en el distrito industrial de Camaçari, que permaneció durante cinco años albergada en la Incubadora de Base Tecnológica (Incubatec) del Centro de Investigaciones y Desarrollo (Ceped), de la Universidad Estadual de Bahía. Estos suplementos alimenticios, conocidos como probióticos, regulan la flora intestinal de los animales, al margen de prevenir y curar la diarrea.
“Ellos también sustituyen a los antibióticos y otras drogas utilizadas como promotores del crecimiento”, dice la profesora Elenalva Maciel, de la Universidad Estadual de Feira de Santana y propietaria de la empresa. Los probióticos promueven un mejor desarrollo físico del animal al generar una conversión más efectiva de los alimentos. “En cinco años, los probióticos serán una rutina en el engorde de animales”, afirma. Actualmente, Microbiol tiene dos productos en el mercado, uno destinado a los animales domésticos y otro para bovinos, equinos, caprinos y porcinos.
En breve será lanzado un tercero para aves. La capacidad de producción de la empresa es de 40 mil ampollas por mes, y la facturación gira en torno a los 220 mil reales anuales. Para Elenalva, este éxito se debe en parte a la incubadora. “La misma fue esencial para que yo lograra hacer despegar al negocio”. Los productos de la empresa fueron inicialmente desarrollados con base en la disertación de maestría de Elenalva en la Universidad Federal de Viçosa, Minas Gerais.
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