Imprimir Republish

Arte

Del piano a la investigación

Eduardo Monteiro concilia la carrera musical con la académica

Monteiro durante masterclass en la USP: la actividad académica lo llevó a dejar los estudios de piano para las noches

Archivo personal Monteiro durante masterclass en la USP: la actividad académica lo llevó a dejar los estudios de piano para las nochesArchivo personal

El pianista carioca Eduardo Monteiro habla con satisfacción de su “vida atribulada”. Docente, investigador y concertista, para su propia sorpresa, también se sintió cómodo en la jefatura del Departamento de Música de la Escuela de Comunicación y Artes de la Universidad de São Paulo (ECA-USP), cargo que ejerció en 2013. Tan satisfactoria fue la experiencia administrativa que Monteiro aceptó a continuación el cargo de vicedirector de la ECA, el cual ejerce actualmente. “Mis estudios del instrumento ahora han quedado para las noches solamente y los fines de semana”, dice. “No logro estudiar tanto como en la época en que tenía 20 ó 25 años; pero, en compensación, la experiencia ayuda.”

Al igual que la mayoría de los pianistas profesionales, Monteiro empezó a ejercitarse en el instrumento en la infancia. A los 14 años, ya sabía que aquella sería su profesión, cosa que se confirmó con una escalada de premios en concursos importantes en Brasil y en el exterior. En 1989, a los 23 años, se hizo acreedor por unanimidad al primer puesto en el Concurso Internacional de Piano de Colonia, Alemania, además del premio de mejor intérprete de Beethoven. Monteiro considera que ése fue un momento crucial de su carrera. “Fue cuando pensé que a lo mejor lograba hacer alguna cosa en el área”, dice, no sin un dejo de ironía, ya que a esa altura él ya se había graduado en música en la Universidad Federal de Río de Janeiro (UFRJ) y, en rigor, nunca pensó seriamente en hacer en términos profesionales cualquier otra cosa en otra área. Luego vinieron la maestría en Instrumento de Teclado en la UFRJ, el doctorado en Historia de la Música y Musicología en la Universidad París-Sorbona –sobre la obra del compositor brasileño Henrique Oswald (1852-1931)– y un paso durante dos años (Artist Diploma) por el New England Conservatory of Music (Boston, EE.UU.).

Monteiro antes de una presentación: en el horizonte, la realización de cinco conciertos y la grabación de un CD

Júlio AcevedoMonteiro antes de una presentación: en el horizonte, la realización de cinco conciertos y la grabación de un CDJúlio Acevedo

Esas dos experiencias, una en el área de investigación (La Sorbona) y otra en la de ejecución (Boston), le permitieron al pianista “consolidar los conceptos y pensar en cómo se toca”. En 2002 empezó como docente en la ECA. “De entrada no fue muy fácil encontrarme en la universidad”, dice Monteiro. “Somos formados para dar clases del instrumento. Muy pocos se dedican a la formación de investigadores, y fui percatándome de que profundizar en el área podría ser sumamente enriquecedor.” Eso no significa que las presentaciones, en Brasil y en el exterior, hayan disminuido en frecuencia.

Monteiro lleva adelante proyectos de estudios de interpretación del repertorio de piano. Se trata de identificar y registrar por escrito las elecciones que los instrumentistas hacen al ejecutar una obra. “Lo que yo hago es la formalización de todo el proceso de performance”, dice. “Cada nota tocada es fruto de una elección precisa, de una ponderación –eso puede no ser evidente para quienes no son del área– y el conjunto de buenas elecciones hace a la calidad de la ejecución. Esta reflexión existe en toda performance de alto nivel, pero no está registrada prácticamente en ningún lado”. En el primer proyecto en esa línea, entre 2011 y 2012, abordó la ejecución de la Sonata en si menor, de Liszt, y en el estudio actualmente en marcha, la obra es la Sonata op. 111, de Beethoven.

Simultáneamente, Monteiro investiga compositores brasileños cuyas obras son poco conocidas y menos aún sistematizadas. “Es una afinidad con el repertorio: yo me siento muy cómodo tocando esos autores”, dice. En 2007 lanzó, con un concierto en el Wigmore Hall de Londres, el CD Piano music of Brazil por el sello inglés Meridian Records, con obras de autores brasileños del romanticismo, el nacionalismo y el siglo XX, lo cual incluyó una interpretación de Cartas celestes vol. 1, de Almeida Prado (1943-2010), sumamente elogiada por los críticos especializados y por el propio compositor. En 2013, Monteiro gravó el Quinteto y el Quarteto para piano e cordas, de Henrique Oswald, con el Ensamble São Paulo, por el sello Lami.

Ahora es el turno de investigar la obra del compositor, maestro y pianista brasileño Alexandre Levy (1864-1892), tema de un proyecto de extensión iniciado en 2014 que prevé la realización de cinco conciertos y la grabación de un CD. El proyecto está coordinado por Monteiro y por la profesora Luciana Sayure. Los intérpretes del repertorio serán los alumnos de grado y posgrado del Departamento de Música de la ECA. “La obra de Levy es sumamente importante, con influjo del romanticismo europeo y también con elementos precursores de la escuela nacionalista”, dice. “De todos modos, es un compositor muy poco conocido, cuya producción no fue editada, ni grabada o estudiada.”

El año pasado, Monteiro también organizó y dictó, en colaboración con Luciana Sayure, un taller de piano en la USP. Durante una semana, alrededor de 100 personas, entre docentes y alumnos de piano, algunos iniciantes, se turnaron en clases individuales, masterclasses, conciertos y charlas cuyo objetivo principal fue compartir prácticas e información. La idea surgió de la observación de las pruebas de habilidad específica para la admisión en el Departamento de Música de la ECA. “Hay personas que tienen un talento evidente, pero no han tenido una formación adecuada”, dice Monteiro, quien pretende repetir la experiencia el año que viene.

Republicar