¿El bebé tiene fiebre, diarrea o sarpullido? Rápidamente surge la explicación: es porque están saliéndole los dientes. Pero entretanto, estudios más recientes aseguran que la aparición de los dientes no provoca nada al margen de la aparición de los propios dientes. A no ser, claro, inflamaciones en las encías. Sin embargo, muchos profesionales de la salud son los primeros en perpetuar esos mitos, de acuerdo con la pediatra Melissa Wake, del Royal Children’s Hospital, de Melbourne, Australia, que escuchó a 464 especialistas en el tema (NewScientist, 19 de octubre). Casi la mitad de los entrevistados cree que los nuevos dientes causan fiebre. Uno de cada diez pediatras afirma que provocan infecciones.
Y es casi un consenso universal que quitan el sueño y el sosiego de los bebés. Con todo, para Melissa todo eso puede explicarse de manera más sencilla. Los insomnios son comunes entre los 8 y los 10 meses, porque los bebés, probablemente, empiezan a notar que sus padres aparecen cuando ellos lloran en vez de dormir. La fiebre, las infecciones y la diarrea son síntomas comunes que acometen a los bebés por diversos motivos. “Echarle la culpa a los dientes”, dice Wake, “además de demorar la intervención en los casos más graves, puede derivar en tratamientos superfluos con analgésicos y calmantes.”
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