Imprimir Republish

Antropología

Economía de la religión

Se dice frecuentemente que la religión contribuye para el capital social, aunque bajo circunstancias específicas. Los movimientos religiosos de renovación son comunes entre poblaciones marginadas y de baja renta y parecen ser, frecuentemente, los únicos que construyen instituciones en circunstancias de extrema pobreza y decadencia o vacío institucional; los movimientos religiosos presentan numerosas características no democráticas, tales como jerarquías autoritarias y una fuerte presión sobre sus fieles para que hagan sacrificios y contribuyan con dinero. El estudio “La milagrosa economía de la religión: un ensayo sobre capital social”, de David Lehmann, de la Universidad de Cambridge, explora las implicaciones teóricas de esas observaciones aparentemente paradójicas, mediante la adopción del abordaje de la teoría de la selección racional, junto con el concepto de poder y con un concepto de capital social que pone el énfasis en la transparencia y en la construcción de instituciones democráticas en la sociedad en general. El argumento es ilustrado por los ejemplos de las iglesias evangélicas de América Latina y del judaísmo ultra ortodoxo y concluye presentando la visión de que, aunque la contribución de los movimientos religiosos a la democratización general sea limitada, eso no es suficiente para menospreciar lo que ellos hacen por sus propios seguidores.

Horizontes Antropológicos – Tomo 13 – nº 27 – Porto Alegre – ene./jun. 2007

Republicar