Los que sienten miedo de sentarse en las hileras de asientos ubicadas al lado de las alas de los aviones se sentirán más molestos aún si el nuevo proyecto de aeronave de la Nasa sale realmente de los campos de pruebas y gana los aires. Es el avión ala, que consumiría un 20% menos de combustible debido a su diseño: no tiene estructura tubular ni tampoco cola, como los modelos actuales. Conducido remotamente por una tripulación compuesta por tres pilotos, un miniprototipo de esta futurista aeronave – con un 5% de las dimensiones de un eventual modelo comercial y que pesa 36 kilos – fue aprobado en noviembre en los ensayos de desempeño realizados en un túnel de viento de la agencia espacial estadounidense ubicado en el Centro de Investigaciones Langley, en Hampton, estado de Virginia. Uno de los desafíos que aún queda por vencer para que la idea, un sueño que ya dura más de diez años, despegue definitivamente, es hallar una manera de presurizar todo por igual el interior completo del avión ala.
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