Daniel Bueno El análisis del ADN de 6.357 habitantes de Brasil, Colombia, Chile, Perú y México suministró pistas importantes acerca de la influencia de tramos del genoma humano con relación al color, la forma y la ausencia de cabellos y características de las cejas y de la barba (Nature Communications, 1º de marzo). Se identificaron 18 asociaciones entre genes y rasgos físicos de los participantes del estudio, coordinado por científicos de la University College London. Según los autores del trabajo, diez de esas asociaciones son inéditas. Dos descubrimientos cobraron relieve: el rol del gen IRF4, presente en el cromosoma 6, sobre el proceso de pérdida de color de los cabellos, y el efecto de una mutación en el gen PAX3, hallado en el cromosoma 2, sobre el formato de las cejas. El IRF4 participa en el control de la producción y del almacenamiento de melanina, un pigmento oscuro presente en la piel y en el pelo. En el caso del PAX3, el artículo muestra que una variante del gen hace que las cejas se junten y formen una sola. Este estudio se realizó con habitantes de la Latinoamérica debido a su gran variabilidad genética y sus características capilares. La parte brasileña del trabajo estuvo a cargo del grupo de los profesores Francisco Salzano y Maria-Cátira Bortolini, de la Universidad Federal de Rio Grande do Sul (UFRGS).
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