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Perfil

El ingeniero distinto

Consultor de I&D le da nombre a un criterio de proyecto en el área de motores

EDUARDO CESAREduardo Tomanik es un ingeniero mecánico que trabaja en Mahle, una multinacional de autopartes de origen alemán, realiza su posdoctorado en la Universidad de São Paulo (USP) y le dio nombre a un parámetro internacional en tribología, el área que estudia el rozamiento, el desgaste y la lubricación. El Criterio Tomanik de conformidad de anillos de cilindros de motores de automotores, presentado en un artículo técnico en 2009, es citado por autores del área y utilizado en software de simulación en diversas empresas del mundo. Tomanik tiene 57 años y empezó a trabajar en Embraer, en São José dos Campos (São Paulo), enseguida después de recibirse en la Escuela Politécnica de la USP. “Fue muy importante trabajar allá durante dos años. Como recién graduado aprendí a tener rigor técnico, y a consultar bibliografía y normas técnicas”, dice. Después, en 1984, al querer volver a la capital paulista, entró en Cofap, en Mauá, en el Gran São Paulo, una empresa que fabricaba autopartes y que en 1997 fue comprada y dividida entre Mahle y Magneti Marelli.

“En Cofap había menos ambición tecnológica y yo deseaba profundizarme teóricamente, por eso me tenían como extraño. Pero los gerentes y los directores también querían que la compañía innovase y aceptaban que al menos un ingeniero fuese distinto, entonces coincidieron en que yo hiciera mi maestría en la USP, cosa que en la industria era algo fuera de lo común en aquellos tiempos”, recuerda Tomanik. “Ellos quedaron en que yo pasase medio día por semana en la USP, donde tuve al profesor Francisco Nigro como director de tesis, quien alineaba  bien práctica y teoría.” Después, Tomanik hizo su doctorado también con el mismo director y empezó a publicar en revistas científicas, siendo el primer doctor “producido” en Cofap. “Incluso tuvieron que ponerle el nombre investigador a cargos como el mío”. En 1997, la parte de motores de Cofap quedó con Mahle y entonces todo cambió. En las empresas alemanas, el reconocimiento de los títulos de posgrado es mayor, así como el rigor técnico, y así la conexión con el Centro de Investigación y Desarrollo de Mahle en Stuttgart, en Alemanha, se concretó muy rápido. “Mis publicaciones me ayudaron mucho.”

Tomanik es consultor de Investigación y Desarrollo (I&D) del Centro de Tecnología de Mahle con sede en Jundiaí (São Paulo) y tan sólo una vez ocupó un puesto de jefe en sus 30 años de empresa. “Aunque sea interesante, el cargo tenía la parte burocrática que no me atrae, por eso preferí volver al área de investigación, y tengo varios proyectos con la USP, el MIT [el Instituto de Tecnología de Massachusetts] y la Universidad de Halmstad, en Suecia”, dice. El investigador actúa también en la Sociedad de Ingenieros de Movilidad (SAE) como coordinador del comité técnico de motores Otto. En el posdoctorado, participa en proyectos tales como uno del Programa la Investigación en Asociación para la Innovación Tecnológica (Pite) de la FAPESP sobre tribología en motores flex-fuel, en el cual Mahle participa.

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