Un nuevo proceso de estandarización química combinando un auto-arreglo molecular con la litografía convencional (antigua técnica de grabación) para crear superficies multifuncionales en sensores y otros dispositivos que exijan precisión molecular fue desarrollado por un grupo de investigadores de la Universidad del Estado de Pensilvania en los Estados Unidos. El proceso permite la creación de superficies con diversas funciones químicas y promete incorporar la litografía usada actualmente para la producción de semiconductores. La nueva técnica, que podrá tener aplicaciones en la química aplicada y la bioquímica. Fue descrita en la edición del 22 de diciembre de 2006 de la Revista Advanced Materials. La técnica usa monocapas auto-organizadas – películas químicas compuestas por una densa molécula para construir una capa sobre una superficie. Un revestimiento fotolitográfico – impresión de un circuito electrónico por medio de la luz – funciona como una barrera e impide interacciones de las moléculas entre las monocapas.
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