Dos estudios dados a conocer en mayo pasado demostraron que la degradación ambiental en Brasil sigue siendo acelerada. Se registran quemas en todas las regiones, no solamente en las fronteras agrícolas, hay ríos contaminados en el 38% de las ciudades, y están surgiendo dos nuevas áreas de deforestación – en el norte del estado Pará y en el oeste de Bahía – , de acuerdo con el estudio del Instituto Brasileño de Geografía y Estadística (IBGE) presentado el día 13. Cinco días después, el Instituto Nacional de Investigaciones Espaciales (INPE, por su sigla en portugués) comunicó que un área de 26.130 kilómetros cuadrados fue deforestada en la Amazonia entre 2003 y 2004, con un crecimiento de 6,23% con relación al período anterior. Es la segunda área deforestada en tamaño, menor únicamente que la del período 1994-1995, cuando la Selva Amazónica perdió 29 mil kilómetros cuadrados.
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