La falla de comunicación entre los profesionales de la salud en los centros de tratamiento intensivo puede estar relacionada con el aumento de mortalidad de los pacientes críticamente enfermos. Los enfermos fueron divididos en tres grupos según los hábitos de comunicación de sus médicos asistentes con los médicos de rutina: comunicación diaria de la conducta, comunicación eventual y rara comunicación. Se analizaron las consecuencias de la falla en la comunicación entre los profesionales médicos (atraso en la realización de procedimientos, en la realización de exámenes diagnósticos, en el comienzo de la antibioticoterapia, en la desconexión del soporte ventilatorio y en el uso de vasopresores) e inadecuaciones en la prescripción médica (ausencia de cabecera elevada, ausencia de profilaxis medicamentosa para úlcera de estrés y para trombosis venosa profunda) relacionadas con el desenlace de los pacientes. En total había 792 pacientes en el estudio. La mortalidad fue mayor entre los pacientes pertenecientes al grupo de rara comunicación (un 26,3%) comparada con los demás (comunicación diaria, un 13,6%, y comunicación eventual, un 7,1%). Estos detalles se encuentran en el artículo intitulado “La adecuada comunicación entre los profesionales médicos reduce la mortalidad en un centro de tratamiento intensivo”, de Cassiano Teixeira, Eubrando Silvestre Oliveira, Sérgio Fernando Monteiro Brodt, Roselaine Pinheiro Oliveira, Felippe Leopoldo Dexheimer Neto y Cíntia Roehrig, do Hospital Moinhos de Vento de Porto Alegre, y Terezinha Marlene Lopes Teixeira, de la Universidad de Vale do Rio dos Sinos.
Revista Brasileira de Terapia Intensiva – Tomo 22 – nº 2 – São Paulo – abr./ jun. 2010
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