DENISE GARCIATan rara como la difusión de la música electroacústica en Brasil es la documentación de su historia y su repertorio. Desde que realizó su doctorado en Francia, la compositora erudita, docente de la Universidad de Campinas (Unicamp) e investigadora Denise Garcia, se ha dedicado a recuperar y analizar ese complejo y restringido arte musical brasileño.
Luego de la investigación, que contó con el apoyo de la FAPESP, en la cual recuperaba los albores de la música electroacústica paulista mediante el estudio de los pioneros en el estado –el grupo Música Nova, Gilberto Mendes, Rogério Duprat, Willy Corrêa de Oliveira–, Garcia se dedicó a la generación carioca de Tim Rescala, Rodolfo Caesar, Vânia Dantas Leite y Rodrigo Cicchelli. “Reuní material con los propios compositores, y todavía estoy trabajando en eso”, dice Garcia, quien cuenta con una beca de productividad del CNPq.
Para ella, Caesar es uno de los más fecundos compositores del área. Sobre su premiada obra intitulada Introdução à pedra [Introducción a la piedra], de 1989, Garcia concluyó recientemente un análisis gráfico que había iniciado en 2007. “Horas y horas de trabajo rinden 10 ó 20 segundos de música”, dice la profesora.
DENISE GARCIAPor ahora, la difusión del resultado de las investigaciones se restringe a congresos y a conferencias de la autora. El análisis gráfico de la obra de Caesar –cuya muestra puede verse en estas páginas– es inédito. En él, cada sonido en sus variaciones de volumen, ritmo, timbres, evolución e intensidad es representado por diferentes dibujos y colores. Concluida esa parte, ahora de abocará a la elaboración del texto, detallando cada paso de su actividad.
Garcia utiliza el software Acousmograph, desarrollado por el INA/ GRM (Groupe de Recherches Musicales, creado en 1948 por Pierre Schaeffer), donde ella realizó una pasantía luego del doctorado. “Esta aplicación efectúa dos tipos de visualización de señal sonora: una de amplitud de la señal y otra es el sonograma”, explica. Este último, en forma de gráfico en los ejes de tiempo y frecuencia, apunta todas las frecuencias de la señal, pero no distingue los eventos musicales. “Con este programa es posible dibujar lo que se escucha por arriba de ese sonograma. Separamos los sonidos en el dibujo y de esta forma analizamos la música.”
La investigación de Garcia consiste en analizar, interpretar y actualizar tecnológicamente las obras originales. “En las obras mixtas de Gilberto Mendes había cosas creadas para tocadiscos y discos de la época que desaparecieron. No se pueden montar de nuevo esas obras con la misma tecnología anterior”. La idea fue ponerlas nuevamente en repertorio, pero utilizando nuevos equipos, tal como es el caso de la computadora. “En el caso de Mendes, el remontaje de las partes de tape estuvo a cargo del alumno Clayton Mamedes.”
Tal como enfatiza Fernando Iazzetta, de la Escuela de Comunicación y Artes de la Universidad de São Paulo, especializado en nuevas tecnologías musicales, “nuestra musicología, a excepción de compositores como Villa-Lobos, Carlos Gomes y Henrique Oswald, nunca tuvo el debido cuidado con la producción nacional”. Para Iazzetta, aparte de la recuperación de la “historia inicial de una producción reciente y relevante de la música brasileña”, la investigación de Denise Garcia tiene otros méritos. “Los compositores están vivos, y esto permite conocer la dinámica de esa historia por dentro. Además, la propia Denise formó parte de esa historia como compositora.”
Fue más o menos a los 30 años cuando ella fue a parar a la música electroacústica “por un camino singular”, como autodidacta. Hacía trabajos de grabación con sonoridades ambientales, “y llevaba todo a la computadora: montaba y desmontaba”, en un proceso cuasi artesanal de filtrado de sonidos.
En su maestría realizó un mapeo de São Luís, capital de Maranhão, a partir del Poema sujo [Poema sucio], de Ferreira Gullar. Con ésas y otras experiencias terminó por profundizar en el estudio de metodología de la investigación. “Es un tipo de música que no tiene partitura, solamente está el oído, que no es confiable, porque yo escucho una cosa y usted escucha otra. Existen muchas discusiones alrededor de esto. Es un repertorio sobre el cual la musicología trabaja muy poco, debido a esa dificultad.”
La idea del análisis gráfico para la música electroacústica es antigua y antes de la era digital se la dibujaba a mano. Garcia se muestra convencida de que el método es bueno, no solamente para la música electroacústica, sino también para la instrumental. “Uso esta herramienta también para analizar la música clásica tradicional con los alumnos. Y ellos salen convencidos de que eso es bueno, porque sin la partitura escuchamos la música de manera distinta.”
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