La capacidad autorregenerativa es un fenómeno universal en los organismos vivos. En los organismos unicelulares, se restringe a la presencia de enzimas responsables de la recuperación de elementos estructurales y de moléculas de alta complejidad. En organismos superiores, también ocurre la reparación de dos formas: por la regeneración con la recomposición de la actividad funcional o por la cicatrización con el restablecimiento de la homeostasis del tejido con la pérdida de su actividad funcional por la formación de cicatriz. Con el artículo “Mecanismos envueltos en la cicatrización: una revisión”, los investigadores Carlos Balbino, Leonardo Pereira y Rui Curi, todos del Instituto de Ciencias Biomédicas de la Universidad de São Paulo (USP), pretenden ofrecer subsidios conceptuales para que una conducta terapéutica eficiente pueda asumirse cuando sea necesario. El proceso de cicatrización, describe el texto, ocurre fundamentalmente en las fases de inflamación, formación de tejido granuloso, deposición de la matriz extracelular y la remodelación. El estudio discute los eventos celulares de cada una de esas fases, con especial énfasis en la participación de los factores de crecimiento.
Revista Brasileira de Ciências Farmacéuticas – Tomo 41 – nº 1 – São Paulo – ene./ mar. 2005
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