Los continentes son mosaicos de rocas de los más diversos tipos, edades y orígenes. Su descripción constituye un eterno enigma para geólogos como los del grupo liderado por Carlos de Araújo, del Servicio Geológico de Brasil con sede en la ciudad de Fortaleza, que investiga cómo se formó la región de la Provincia Borborema con rocas del grupo Novo Oriente, en el oeste del estado de Ceará (Gondwana Research). Análisis geoquímicos y geocronológicos, sumados a las observaciones de campo, demostraron que el grupo Novo Oriente tiene detritos de interior de cratón, nombre dado a las partes antiguas de la corteza del planeta. La cuenca puede haber surgido hace alrededor de 1.300 millones de años, o, según especula Araújo, como producto de la fragmentación del supercontinente Rodinia, hace menos de mil millones de años.
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