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Política C&T

Para impulsar la cultura científica

La FAPESP evalúa el impacto de sus programas y crea una agencia de noticias

La FAPESP ha lanzado un proyecto de evaluación de los resultados de sus políticas de fomento a la investigación, y una agencia de noticias, para ampliar el alcance de la divulgación científica. “Ambas iniciativas, aparentemente aisladas, se articulan conceptual y filosóficamente en lo que se refiere al papel institucional”, explica Carlos Vogt, presidente de la Fundación. Para Vogt, la cultura científica desarrolla una espiral que se mueve en cuatro cuadrantes.

Su punto de partida es la producción y la difusión de la ciencia entre los pares, función que involucra a los investigadores y al aparato institucional de fomento y producción de conocimiento; se amplia a la enseñanza de la ciencia y la formación de científicos, involucrando a científicos, profesores y estudiantes, desde la enseñanza fundamental hasta el posgrado; avanza en la dirección de la enseñanza para la ciencia, que tiene entre sus diversos actores desde a los profesores y directores de museos hasta a jóvenes estudiantes, y completa un círculo con la divulgación científica, que es cuando el conocimiento producido reverbera sobre la sociedad en general, antes de reiniciar el ciclo, cada vez más extendido.

“El autoconocimiento de la institución, mediante la evaluación de sus programas, y la agencia de noticias contribuyen en la dinámica de esa espiral”, justifica Vogt. El proyecto de evaluación de los resultados de las políticas de fomento de la FAPESP se extenderá durante un período de diez años. El mismo está dividido en cuatro subproyectos. El primero, actualmente en marcha, comprende la confección de un inventario del parque de equipamientos de mediano y gran porte financiados por la Fundación, en el marco de sus diversos programas especiales, de innovación tecnológica y de auxilios a la investigación, teniendo en cuenta su condición de uso y el ambiente en el cual se inserta.

Estos datos serán recabados en los procesos de prestación de cuentas -que se están digitalizando-, por medio de cuestionarios electrónicos que se les enviarán a los investigadores y a los grupos beneficiados. Las informaciones serán reunidas en un banco de datos accesible vía internet para cualquier investigador. El proyecto estará concluido a mediados del segundo semestre. “La idea es formular un diagnóstico para la política de concesión de nuevos equipamientos”, explica Vogt.

El segundo subproyecto trazará el perfil de la demanda de financiamientos ante la FAPESP desde 1992, recabando datos tanto sobre los investigadores que tuvieron proyectos aprobados como sobre aquéllos a los que se les rechazaron sus solicitudes. “Poco sabemos sobre ellos”, afirma Vogt. Bajo la misma perspectiva, el tercer subproyecto rastreará la trayectoria científica y profesional de los investigadores que, durante los últimos diez años, contaron con alguna forma de auxilio de la FAPESP. “Estos datos ayudarán a que la institución conozca su rol en el proceso de formación de científicos”, afirma Vogt.

Y finalmente, el cuarto subproyecto evaluará los reflejos del apoyo brindado por la institución a las empresas que integran los programas Innovación Tecnológica en Pequeñas Empresas (PIPE, sigla en portugués) y Asociación para la Innovación Tecnológica (PITE, también en su sigla en portugués), y creará indicadores de desempeño. Ambos programas cuentan con 185 y 58 proyectos aprobados, respectivamente, en diferentes fases de desarrollo. Los datos sobre los dos programas serán recabados en el Centro de Procesamiento de Datos de la Fundación, mediante la aplicación de un cuestionario enviado a los coordinadores de los grupos de investigación, de manera tal de fijar criterios que permitan la comparación entre los distintos emprendimientos.

El proyecto es coordinado técnicamente por Jocimar Archângelo, asesor especial de la presidencia, quien fue responsable del examen de ingreso de la Universidad Estadual de Campinas (Unicamp) y de la implementación del Examen Nacional de la Enseñanza Media (Enem), del Ministerio de Educación (MEC). El investigador responsable es Geraldo di Giovanni, de la Facultad de Economía de la Unicamp. Los subproyectos serán coordinados por Helena Maria Cunha do Carmo Antunes, de la Escuela de Ingeniería de São Carlos de la Universidad de São Paulo (EESC-USP), y Eugênia Maria Reginato Charnet, del Instituto de Matemática, Estadística y Computación Científica de la Unicamp.

Al final de junio, la FAPESP estrenó una agencia de noticias de ciencia y tecnología: la Agencia FAPESP, que cuenta con un sitio (www.agencia.fapesp.br) y boletines diarios, que se distribuyen por correo electrónico entre un público amplio y diversificado integrado por investigadores, dirigentes de órganos de fomento, universidades e institutos de investigación brasileños, políticos, periodistas y otros interesados en ciencia y tecnología.

La Agencia FAPESP está integrada a la gerencia de comunicación, dirigida por la periodista Maria da Graça Mascarenhas. No es una agencia productora de noticias relacionadas exclusivamente con la Fundación, sino que tiene un radio de acción mucho mayor. Produce noticias, entrevistas y artículos especiales sobre temas relacionados con la política científica y tecnológica y la difusión de resultados de investigaciones desarrolladas en Brasil y en el exterior. La suscripción para la recepción de los boletines de la agencia es gratuita, y puede hacerse en el propio sitio.

“El principal papel de la Agencia FAPESP consiste en difundir la cultura de la ciencia”, dice Vogt. “La agencia surgió como una necesidad natural, ya que es importante intentar entender cómo se hace ciencia, pero es más importante aún comprender cómo ésta se desarrolla y evoluciona. La agencia de noticias puede ser algo nuevo para la FAPESP desde el punto de vista de la novedad puntual, pero no así desde punto de vista de la cultura de la Fundación, que siempre tuvo este tipo de preocupación.”

La agencia se articula a otras iniciativas de la Fundación en el área de difusión científica, como lo son la revista Pesquisa FAPESP, su edición electrónica (www.revistapesquisa.fapesp.br) y el sitio de la Fundación (www.fapesp.br). Al trabajar de esa forma articulada, las informaciones generadas por cada uno de estos productos pueden ser aprovechadas por losotros. Así y todo, la agencia cuenta con un equipo propio, coordinado por el periodista Heitor Shimizu. Los primeros boletines fueron enviados a alrededor de 15 mil personas, pero durante la primera semana ese mailing creció significativamente, principalmente en razón de las solicitudes efectuadas directamente en el sitio.

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