Aquéllos que viven en la región sur de Brasil deben estar atentos al clima al caer las tardes de septiembre y octubre, y prepararse para los serios trastornos que causan las tormentas. Durante ese período del día, especialmente a comienzos de la primavera, sobrevienen en Brasil las lluvias de granizo más destructivas, aquéllas que, con frecuencia, causan daños en las plantaciones, criaderos y construcciones, dejando a la gente a la intemperie. Principalmente, afectan a las regiones oeste y central, así como la franja del litoral de los estados de Rio Grande do Sul, Santa Catarina y Paraná. Esta conclusión forma parte de un mapeo nacional de las tormentas de granizo más destructivas (Atmospheric Research, edición del 21 de octubre). En este trabajo, científicos del Instituto Federal de Paraná (IFPR) y de la Universidad de São Paulo (USP), en colaboración con colegas de la agencia espacial estadounidense (NASA), realizaron un mapeo de las tempestades de granizo registradas por Defensa Civil nacional entre 1999 y 2012. Registraron 1.630 tormentas y analizaron la distribución de 732, sobre las cuales se contaba con información minuciosa, tal como el horario del día, el lugar en que se produjeron y la dimensión de los estragos que ocasionaron. El registro in situ es importante para corroborar los mapeos realizados vía satélite y corregir los modelos de previsión climática. El mapa confirma que la región del sur de Brasil es una de las que registra más tempestades violentas de granizo en todo el planeta.
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