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EMPRENDIMIENTOS

Campo fértil para la innovación

Un estudio analiza la distribución de los proyectos de pequeñas empresas paulistas de base tecnológica e indica que São Carlos se erige como el polo más denso

Pipe_246La formación de polos de innovación en el estado de São Paulo se ve influida por algunos factores singulares y no siempre se alinea con la dinámica que se observa en otros países. Ésta es una de las conclusiones a las que arriba un estudio llevado a cabo por investigadores de la Universidad de Campinas (Unicamp) y de la Universidad George Washington, en Estados Unidos, que analizó la predominancia en diferentes regiones del estado de aquello a lo que se ha denominado como emprendimientos intensivos en conocimiento (KIE, según sus siglas en inglés). Se trata de una concentración de empresas jóvenes e innovadoras que emplean nuevas tecnologías generadas por las universidades y por ellas mismas y logran sacar provecho de oportunidades de negocio en diversos nichos.

Los investigadores se basaron en datos del programa de Investigación Innovadora en Pequeñas Empresas (Pipe) de la FAPESP, que desde 1997 fomenta la investigación científica y tecnológica en las micros, pequeñas y medianas empresas de los municipios paulistas. Según manifiestan los autores, se trata de un indicador confiable, aunque acotado, de la localización de la innovación empresarial en el estado. Se analizaron 1.130 proyectos Pipe distribuidos en 114 localidades donde al menos se haya aprobado un proyecto entre 1998 y 2014. Cinco de ellas se destacaron por su alta concentración de proyectos: São Paulo (298 proyectos), Campinas (197), São Carlos (177), São José dos Campos (72) y Ribeirão Preto (55). Lo más notorio es que, si bien la capital paulista concentra la mayor cantidad de proyectos, en términos relativos, es São Carlos la que más se destaca, con 199 proyectos Pipe por cada 100 mil habitantes (observe el gráfico).

El estudio brindó un aporte original al indicar que, en contraste con lo que señala la literatura acerca de la constitución de clústeres de innovación en países desarrollados, la existencia de grandes conglomerados urbanos en el estado de São Paulo no se tradujo automáticamente en una concentración de emprendimientos intensivos en conocimiento. La hipótesis que manejan los autores refiere que, en los países en desarrollo, ciertas desventajas de índole económica en las grandes metrópolis empujan a las empresas hacia otras regiones. Los investigadores cruzaron información sobre la concentración de proyectos Pipe con indicadores socioeconómicos de los municipios extraídos del Sistema Estadual de Análisis de Datos (Seade). Entonces constataron, por ejemplo, que ciertos indicadores de movilidad, tales como el número de habitantes por automóvil, y demográficos, como la densidad poblacional, ejercen un impacto negativo en la localización de los proyectos Pipe. En tanto, otros indicadores que se analizaron, como en el caso de la criminalidad, pareciera que no tienen influencia. “El tránsito excesivo en las grandes metrópolis entorpece la logística, eleva los costos de innovación y podría señalárselo como una de las causas del proceso de desindustrialización de la capital paulista en las últimas décadas”, explica Bruno Brandão Fischer, docente de la Facultad de Ciencias Aplicadas de la Unicamp, campus de Limeira, y autor principal del estudio, que fue presentado el año pasado en la Atlanta Conference on Science and Innovation Policy, en Estados Unidos.

Sin embargo, una relativa proximidad de las pequeñas empresas de base tecnológica con los grandes centros urbanos se reveló como un factor decisivo para el surgimiento de polos de innovación. “Es en los centros económicos donde residen los potenciales clientes y usuarios de los servicios tecnológicos”, afirma Sérgio Robles Reis de Queiroz, docente del Departamento de Política Científica y Tecnológica del Instituto de Geociencias de la Unicamp, otro de los autores del artículo. “Para aquél que se dedica a la investigación empresarial en el estado de São Paulo, estar cerca de la capital y el conocimiento que allí se produce es algo bueno, pero no necesariamente dentro de ella”, explica Queiroz, quien se desempeña como coordinador adjunto en el área de Investigación para la Innovación de la FAPESP.

El trabajo no indaga en las razones que erigen a São Carlos en ese sitial, pero esboza algunas hipótesis relativas a las condiciones locales que propiciarían la concentración de proyectos Pipe en la ciudad. “Estamos dando comienzo a un estudio sobre São Carlos y ya puede afirmarse que la infraestructura de investigación local, que incluye a la Universidad Federal de São Carlos (UFSCar), un campus de la Universidad de São Paulo (USP) y empresas tales como Embrapa, cumple un rol fundamental”, informa Fischer.

El Laboratorio Nacional de Luz Sincrotrón, en Campinas...

Eduardo Cesar El Laboratorio Nacional de Luz Sincrotrón, en Campinas…Eduardo Cesar

El municipio registra alta concentración de doctores. Un estudio efectuado a mediados de los años 2000 por Jorge Oishi, estadístico y docente jubilado de la UFSCar, reveló que en ese entonces la ciudad contaba con 1.700 doctores, entre una población de unos 230 mil habitantes. Allí también se creó una de las primeras incubadoras de empresas con base tecnológica de Brasil, en la Fundación Parque de Alta Tecnología (ParqTec), en 1985, emplazado muy cerca de los campi de la UFSCar y de la USP. Según ese estudio otros factores de impacto para la concentración de proyectos Pipe en esa localidad están relacionados con la movilidad urbana y un menor costo de vida.

São Carlos se encuentra ubicado a 230 kilómetros de la capital paulista y ese trayecto se cubre por autopista en poco más de dos horas. Marco Antonio Pereira, socio de Itera, una empresa que se instaló en São Carlos en 2008 y se especializa en proveer soluciones tecnológicas para la gestión de documentos electrónicos, viaja habitualmente a São Paulo todas las semanas. “Ahí están nuestros principales clientes”, comenta. La decisión de radicarse en São Carlos estuvo relacionada con el ambiente científico de la ciudad. “La empresa está emplazada a pocos minutos de los departamentos de ciencias de la computación de la USP y de la UFSCar, con los cuales trabajamos frecuentemente”, explica Pereira, quien es máster en ciencias de la computación por la UFSCar.

En 2015, la compañía recibió ayuda del Pipe para el desarrollo de un software que extrae los principales conceptos y palabras de grandes volúmenes de documentos y ayuda a ordenarlos, y contó con la colaboración del Instituto de Ciencias Matemáticas y de Computación (ICMC) de la USP. “Este instituto está conectado a redes internacionales. Esa sintonía con el ICMC es una forma de mantener conectada a la empresa con el conocimiento a nivel global”.

Ese fenómeno puede observarse en otras ciudades, y los argumentos son similares. “Estamos en São José dos Campos, a escasos 100 kilómetros de São Paulo. Esta corta distancia nos permite impulsar nuevos negocios en la capital, sin necesidad de cargar, por ejemplo, con los altos costos de un alquiler allí”, explica la ingeniera Renata de Cássia Ferreira Silva, socia de RVT, una empresa dedicada a la gestión del consumo de energía eléctrica. En 2015, la compañía recibió ayuda del Pipe para el desarrollo de un simulador capaz de estimar la reducción del consumo de energía eléctrica en dispositivos de refrigeración industrial. En el marco de las investigaciones que lleva a cabo, la empresa mantiene colaboraciones con la Facultad de Ingeniería Química de la Unicamp y con el Parque Tecnológico de São José dos Campos, que interactúa con empresas tales como Embraer, Vale, Ericsson y Sabesp.

..e investigación en terapia fotodinámica en el Instituto de Física de São Carlos de la USP: dos ciudades con distintos sistemas de innovación

Eduardo Cesar ..e investigación en terapia fotodinámica en el Instituto de Física de São Carlos de la USP: dos ciudades con distintos sistemas de innovaciónEduardo Cesar

Perfiles distintos
Los resultados del estudio suscitan un debate sobre las razones por las cuales ciudades como São Carlos y Campinas, ambas con una notoria vocación innovadora, ofrecen perfiles diferentes en la concentración de proyectos desarrollados por pequeñas empresas. Si bien en cifras absolutas el desempeño es similar, en términos relativos la diferencia es grande: São Carlos computa 199 proyectos Pipe por cada 100 mil habitantes, mientras que Campinas, con una población cuatro veces mayor, registra 43 proyectos similares en la misma proporción. En opinión del economista Marcelo Silva Pinho, docente de la UFSCar, uno de los motivos es que las dos ciudades disponen de sistemas de innovación local muy diferentes. Según él, la mayoría de las startup radicadas en São Carlos surgieron a partir de proyectos desarrollados dentro de las universidades instaladas en la ciudad. “En el caso de São Carlos, muchas de las empresas son un desprendimiento de iniciativas individuales de investigadores y profesores. En tanto, en Campinas, que cuenta con un ambiente industrial más complejo, varias empresas con base tecnológica son una escisión de otras empresas”, explica Pinho. Tales características incidirían en la concentración de proyectos Pipe. Una de las hipótesis que arriesga es que los emprendedores con perfil académico estarían más familiarizados con los trámites necesarios para la elaboración de proyectos y la participación en llamados a presentación de propuestas, mientras que los empresarios con experiencia en la industria recurren a otros métodos para financiarse.

Las diferencias entre los sistemas de innovación de São Carlos y Campinas también pueden reconocerse en la forma en que las empresas se relacionan con el conocimiento local, sugiere Gustavo Benevides, docente de la Escuela Superior de Administración, Marketing y Comunicación de Campinas (Esamc) y autor de varios artículos sobre la gestación de polos tecnológicos en el interior paulista. “En Campinas, noto que las empresas interactúan bastante con centros de Excelencia, entre los que podemos citar al Centro Nacional de Investigación en Energía y Materiales (CNPEM), el Centro de Investigaciones Renato Archer, el Núcleo de Innovación Tecnológica Mantiqueira y el Instituto Eldorado, y en ocasiones, incluso más que con la Unicamp”, señala Benevides. Según él, esa dinámica es el reflejo de un sistema de innovación cuyos autores interactúan puntualmente y en forma más dispersa. “En Campinas, los institutos de investigación no efectúan demasiado intercambio entre sí y trabajan de forma más independiente, estableciendo un mayor contacto con el mercado. Y cuando las empresas precisan soluciones inmediatas, acuden a estos institutos”.

En contraste, en São Carlos, hay una relación más estrecha con las universidades, considera el investigador. “Allá hay tres parques tecnológicos interconectados con la UFSCar y la USP. Eso permite que en São Carlos haya una efusiva interacción entre universidades y empresas”, analiza. Para Sérgio Queiroz, todavía hacen falta estudios capaces de demostrar, con datos concretos, cuáles son los factores que diferencian a los sistemas de innovación en las dos ciudades. “Nuestra investigación no se planteó para responder a ese interrogante”, subraya.

Pipe_Abre_SiteFabio OtuboFormación de clústeres
En los países desarrollados, los grandes conglomerados urbanos albergan con frecuencia buenas universidades atrayendo emprendimientos intensivos en conocimiento para su entorno. “Es importante que las empresas y startup se instalen en ciudades donde resulte fácil activar grupos de investigación en universidades, como una forma de hallar soluciones para sus problemas tecnológicos”, explica Renato de Castro Garcia, docente del Instituto de Economía de la Unicamp. Según su análisis, la concentración de conocimiento en las universidades es uno de los principales factores que condujeron a ciertas localidades a consolidarse como polos de innovación.

En el Valle del Silicio, en California, por ejemplo, las ventajas de hallarse cerca del flujo de informaciones que emanan de las empresas tecnológicas, de una fuerza de trabajo capacitada, de la infraestructura de investigación y de prestadores de servicios y grandes inversores, supera con creces los elevados costos presentes en esa región, acota AnnaLee Saxenian, docente de la Universidad de California en Berkeley, investigadora del área de geografía de la innovación. “Pese a los embotellamientos del tráfico y el alto costo de vida, en el Valle del Silicio siguen surgiendo startup innovadoras”, afirma la investigadora, quien participó en un workshop sobre innovación que se llevó a cabo en la sede de la FAPESP, en el mes de junio.

El éxito de los clústeres también depende de otros factores. “Para obtener éxito en una economía globalizada, las ciudades necesitan estar conectadas a redes globales de conocimiento, por medio de intercambios entre investigadores”, dice Nicholas Vonortas, profesor en la Universidad George Washington y también autor del estudio. El investigador coordina hasta 2019 un proyecto sobre sistemas de innovación en la Unicamp, en el ámbito del programa São Paulo Excellence Chairs (Spec) de la FAPESP. Para Sérgio Queiroz, de la Unicamp, el estudio ayuda a determinar dónde están localizadas, en el mapa del estado de São Paulo, las ciudades donde el suelo es más fértil para la innovación. “Son las ciudades donde las inversiones volcadas a la investigación empresarial ofrecen mayores posibilidades de retorno”, finaliza.

Proyecto
Sistemas de innovación, estrategias y políticas (nº 2013/50524-6); Modalidad Programa São Paulo Excellence Chairs (SPEC); Investigador responsable Nicholas Spyridon Vonortas (Instituto de Geociencias-Unicamp); Inversión R$ 992.533,20 (para la totalidad del proyecto).

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