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Tecnociencia

Suplemento de polvo de caparazones

Las ostras y los mejillones constituyen una opción gastronómica cada vez más consumida. Se separa la parte interna comestible y las valvas que las forman son arrojadas a la basura o desechadas en lugares impropios, convirtiéndose en un problema ambiental. En Corea del Sur, la cantidad de conchas de ostras llega a las 300 mil toneladas anuales. En Brasil no existen datos sobre el volumen de ese material natural descartado, pero la preocupación ambiental existe, tal como muestra un experimento realizado por investigadores de la ciudad de Joinville, en Santa Catarina, estado que ostenta el 90% de la producción de esos moluscos. Los científicos desarrollaron un proceso que utiliza el carbonato de calcio presente en un 95% a un 98% en las valvas, tanto de ostras como de mejillones, para utilizarlo como materia prima en compuestos de polímeros tales como polipropileno, polietileno y PVC. “Durante el proceso se quema ese material y se lo transforma en un polvo para uso industrial”, informa la profesora Daniela Becker, de la Universidad Estadual de Santa Catarina (Udesc).

El carbonato de calcio es utilizado por los productores de tubos y conexiones como material agregado para componer los polímeros. Este carbonato que utiliza la industria se extrae de yacimientos. El paso siguiente para los investigadores consiste en verificar la factibilidad económica de la producción, que estará a cargo de los productores de mariscos.

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