Investigadores de Suiza y el Reino Unido han construido un dron resistente a altas temperaturas que puede utilizarse para evaluar de cerca los focos de los incendios, lo que les permitirá a los bomberos actuar con mayor seguridad. Los drones que toman fotografías aéreas, transportan mangueras o arrojan materiales extintores deben mantenerse a cierta distancia del fuego para evitar sufrir daños. El ingeniero mecánico David Häusermann, de los Laboratorios Federales Suizos de Ciencia y Tecnología de Materiales (Empa) y del Imperial College London, se dio a la búsqueda de alguien que pudiera desarrollar un material de revestimiento liviano y resistente a altas temperaturas. En el Empa, los equipos de Shanyu Zhao y Wim Malfait sintetizaron un aerogel a base de poliimida, un polímero que conserva estable su estructura a casi 500 grados Celsius y está siendo estudiado como un potencial aislante térmico para los trajes espaciales. Häusermann empleó placas de este aerogel, de 1,5 centímetros de espesor, revestidas por una película de aluminio para proteger los componentes electrónicos del dron. Un prototipo del FireDrone fue probado con éxito en un centro de entrenamiento de bomberos cercano a Zúrich. “Incluso después de varios vuelos, los componentes electrónicos, la cámara termográfica y los sensores de CO2 no sufrieron daños”, dijo Häusermann en un comunicado a la prensa (Advanced Intelligent Systems, 13 de junio; Swissinfo.ch, 26 de junio).
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Un dron resistente al fuego
Los componentes recubiertos con poliimida resisten la exposición al calor intenso
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