Éste ha sido un año difícil. Recaudación a la baja, dólar en alza, dudas con respecto al manejo de la economía para el año venidero y un escenario internacional imprevisible. En medio a todo esto, los investigadores siguen trabajando. Y hay cosas para celebrar. El reportaje de portada de esta edición es una prueba de que la ciencia y la tecnología brasileñas continúan avanzando. Hormogen Biotecnologia y Genosys Biotecnologia, dos pequeñas empresas nacionales, han desarrollado separadamente las primeras dosis de la hormona del crecimiento humana (hGH). Brasil importa alrededor de un millón de dosis por año, a un costo de 15 millones de dólares. Pero ese cuadro va a cambiar en 2003. Merced a las asociaciones promovidas por dichas empresas con laboratorios también nacionales, el país ingresará al selecto club de las naciones exportadoras de ese medicamento. Suecia, Dinamarca, Estados Unidos e Italia son los únicos países que dominan en la actualidad las técnicas de ingeniería genética para la producción de la hormona.
Y hay otros ejemplos de innovaciones tecnológicas prometedoras, en otras áreas. Pesquisa FAPESP ha venido mostrando muchos de ellos, que comienzan a ser ideados en los gabinetes de los laboratorios y recorren un largo camino hasta llegar al mercado. Algunos han recibido financiación del Programa de Innovación Tecnológica en Pequeñas Empresas (PIPE) de la FAPESP, que continua apoyando iniciativas similares. Es un indicativo seguro de que otras buenas noticias surgirán a mediano plazo.
Y también a mediano plazo todos los que trabajan con biología recibirán buenas nuevas. Se encuentra en fase de ajustes finales un software que permitirá la integración de bancos de datos con informaciones detalladas sobre especies de plantas, animales y microorganismos del estado de São Paulo. La idea es expandir esa red para poder integrarla a una futura red mundial que aborde el tema en toda esa amplitud, de tal modo que tendremos una especie de catálogo de toda la vida en la Tierra accesible vía Internet. El proyecto es ambicioso y aún es necesario crear una red igual a la de São Paulo para todo Brasil. La conclusión de dicho trabajo está aún distante, pero la parte paulista avanza a pasos firmes.
Otro trabajo que camina a buen ritmo y en el cual ya se pueden notar resultados es el que aborda la obesidad y la diabetes. Un equipo del Instituto de Ciencias Biomédicas de la Universidad de São Paulo reveló que la gran variación de los índices de Glut 4 – una proteína transportadora de glucosa – en ciertos tejidos puede ser determinante para que se desencadenen ambos problemas. Este descubrimiento podrá ser la clave para evitar la acumulación de grasa y la diabetes del tipo 2. Para ello se deberá crear una manera de reducir la producción de Glut 4. La senda ya ha sido abierta, pero aún resta mucho por hacer.
Y en el área de Humanidades también hay muchas cosas por descubrir. Los comunicólogos buscan saber cuál es el status real del área de la comunicación. ¿La ciencia que estudia los medios sería de hecho una ciencia? Y si lo fuese, ¿qué lugar ocupa ésta dentro de las ciencias humanas? ¿Por qué los especialistas de dicha área parecen tan distantes del objeto que estudian? El debate es internacional, aunque en Brasil alcanza niveles institucionales y políticos, pues involucra a organismos de fomento, como la Coordinación de Perfeccionamiento del Personal de Nivel Superior (Capes).
Un año con todas estas novedades, avances y debates en el área de ciencia y tecnología no puede ser considerado como malo para el sector. La entrevista con el filósofo carioca Leandro Konder, autor del recientemente lanzado libro Questão de Ideologia, nos da nuevas esperanzas de tiempos mejores. En dicha entrevista, Kopnder reafirma su creencia en el marxismo – empero, despojado de su carácter doctrinario, que aprisiona, genera cuestionamientos y crea dificultades para una apertura hacia lo nuevo – y habla sobre ideología y religión, sobre Carlos Drummond de Andrade y sobre su amor por las clases para alumnos universitarios de grado. Konder pasa por todos estos temas con sabiduría y tranquilidad. Un aliento para 2003.
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