Una silla desarrollada especialmente para que el propio paciente mida su presión arterial fue patentada por el nefrólogo Décio Mion Junior, profesor de la Facultad de Medicina de la Universidad de São Paulo (USP). Experto en hipertensión arterial, el médico aceptó el reto que le planteó en 2001 el en ese entonces secretario de Salud del estado de São Paulo, José da Silva Guedes, de crear un “detector de hipertensión” para su posterior instalación en los centros de atención primaria en salud. “La principal causa de muerte en nuestro país es la enfermedad cardiovascular representada por el derrame y el infarto, que tiene su origen en la hipertensión arterial”, dice Mion. Ingenieros del Hospital de Clínicas de São Paulo participaron en el desarrollo de un prototipo de la silla. La misma cumplió todos los requisitos técnicos para llevar adelante una buena medición, e incorporó una pequeña impresora para que el resultado pudiera llegar a manos del médico. La mejora del diseño de la silla estuvo a cargo de Fábio D’Elia, quien empezó a fabricarla en su empresa, Dafs Design. La silla está utilizándose en campañas públicas de combate contra la hipertensión arterial, y desde hace un año un laboratorio farmacéutico de São Paulo compró 50 unidades y las distribuyó en clínicas dispersas por varios estados brasileños. La próxima etapa será la instalación de sillas, ya solicitadas por la Secretaría da Salud, en los centros de atención primaria del estado de São Paulo.
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