Con las semillas del ‘urucum’ o anato, de donde se extrae un pigmento rojo utilizado por los indios como colorante y para protección de la piel, el estudiante Bruno de Oliveira Buzzo creó una crema que, combinada con óxido de zinc, demostró en los test ser un eficiente protector solar. La investigación realizada por el estudiante cuando cursaba el tercer año de enseñanza media en la localidad de Rio Claro, en el interior paulista, con la supervisión del profesor José Eduardo Diotto, fue una de las nueve escogidas para representar a Brasil en la Feria Internacional de Ciencias e Ingeniería (Isef), que se realizará entre el 10 y 15 de mayo en Estados Unidos, organizada por la empresa Intel. La feria reúne a estudiantes pre universitarios de alrededor de 50 países. La elección de los proyectos brasileños estuvo a cargo de un comité de evaluación compuesto por más de cien profesores universitarios voluntarios, durante la Feria Brasileña de Ciencias e Ingeniería (Febrace) 2009, organizada por el Laboratorio de Sistemas Integrables (LSI) de la Escuela Politécnica (Poli) de la Universidad de São Paulo, entre los días 17 y 19 de marzo. “Realizada por séptimo año consecutivo, la feria ha sido creada con el objetivo de estimular la cultura de investigación, innovación y emprendimiento en la educación básica brasileña”, dice la profesora Roseli de Deus Lopes, del LSI de la Poli, y coordinadora de la Febrace. Bruno, quien actualmente cursa medicina en la Pontificia Universidad Católica de Campinas y continúa con las investigaciones sobre el protector solar de ‘urucum’, cuenta que descubrió que le gustaba y podía hacer ciencia cuando conoció el trabajo de la Febrace, durante el segundo año de la secundaria. La feria, montada dentro de una gigantesca carpa junto a las instalaciones de la Poli, albergó 282 trabajos científicos, elegidos entre más de mil inscritos, en las áreas de ingeniería, ciencias exactas y de la tierra, ciencias biológicas, salud, ciencias agrarias, ciencias sociales y ciencias humanísticas de todo Brasil. Entre los proyectos seleccionados para la competencia internacional está un dispositivo electrónico que mide la humedad del suelo y acciona los sistemas de irrigación, de São João del-Rei (Minas Geais), y el uso de la fibra de burití [una especie de palmera] como alternativa del telgopor, de Imperatriz (Maranhão)
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