MIGUEL BOYAYANEl observatorio con sede en Argentina: otros diez años de experimentos con partículas que atraviesan tanques de agua situados en el desiertoMIGUEL BOYAYAN
En el mes de noviembre se firmó un acuerdo internacional que permitirá mantener la operatividad del Observatorio Pierre Auger hasta 2025. La firma del documento se produjo en el marco de un simposio en la ciudad de Malargüe, en Argentina, que congregó a científicos y representantes de los organismos de financiación de la investigación de los diversos países miembros del consorcio responsable de la construcción y el funcionamiento del observatorio. El Pierre Auger congrega a más de 500 científicos de 16 países y funciona desde 1998 en Malargüe con el propósito de investigar el origen y la naturaleza de los rayos cósmicos, las partículas más energéticas del Universo, algunas con energías de una magnitud mayor que las pueden obtenerse en el Gran Colisionador de Hadrones del Cern, en Europa. El acuerdo contempla avances en la capacidad de los 1.660 detectores de superficie (tanques de agua sensibles a la luz Cherenkov generada por la lluvia de partículas generadas por la colisión de los rayos cósmicos con la atmósfera) mediante el agregado de detectores de luz de cintilación y la construcción de otros detectores que distinguen los componentes de la lluvia de partículas proveniente del espacio. Los científicos brasileños participan en ese trabajo desde 1998, con el apoyo de la FAPESP, del Consejo Nacional de Desarrollo Científico y Tecnológico (CNPq), del Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación (MCTI) y de la Fundación de Apoyo a la Investigación Científicos del Estado de Río de Janeiro (Faperj).
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