Científicos de un prestigioso laboratorio de biología molecular de la Universidad de Utah, en Estados Unidos, fueron sancionados por errores y descuidos detectados en 11 artículos publicados entre 2007 y 2011. La autora de los trabajos, la profesora del Departamento de Medicina, Ivana De Domenico, fue exonerada, y el veterano patólogo Jarry Kaplan, líder del laboratorio, se jubiló en medio de la investigación del caso, que enumeró la comisión de 21 errores, tales como alteraciones de imágenes, gráficos y tablas, en los cuales se añadieron datos meses después de culminarse el trabajo. El caso surgió el año pasado, cuando dos artículos relativos al balance del hierro en la sangre quedaron sujetos a retractación en la revista Cell Metabolism, luego de que el comité de fiscalización de la Universidad de Utah descubrió que un técnico del laboratorio se deshizo de los resultados primarios de la investigación. Las anotaciones fueron recuperadas y se descubrió que contenían informaciones importantes que faltaban en los artículos publicados. El comité de investigación del caso no confirmó que hubiera intención de falsear los resultados, pero consideró que el proceso estuvo tan marcado por la desidia y la imprudencia que “las publicaciones no representan lo que se hizo en el laboratorio”, tal como lo explicó Jeffrey Botkin, vicepresidente para la integridad en la investigación científica de la Universidad de Utah.
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