El jengibre salvaje (Zingiber zerumbet) también denominado amargo, originario de Asia y utilizado en Brasil como planta ornamental es la materia prima principal de la empresa Biozer, que elabora productos fitoterapéuticos en Manaos, estado de Amazonas. Las raíces de la planta contienen un compuesto denominado zerumbona, con propiedades antiinflamatorias y cicatrizantes. La empresa estudia su utilización en jabones, medicamentos fitoterapéuticos y bebidas energizantes. El fundador de Biozer es el investigador Carlos Cleomir, del Instituto Nacional de Investigaciones de la Amazonia (Inpa) y docente en la Universidad Federal de Amazonas (Ufam), donde elaboró su tesis doctoral, cuyo tema fue la zerumbona. En el Inpa, Cleomir desarrolló una tecnología destinada extraer la sustancia con un altísimo grado de pureza que llega al 99%. En 2011, la empresa solicitó y el Inpa licenció dos patentes cuyo inventor fue el propio Cleomir. La firma también elaboró y depositó en el Instituto Nacional de la Propiedad Intelectual (INPI), patentes para la producción de mermelada, yogur, gel y pomada cicatrizante, además de un jabón antiacné.
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