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Innovación

La multiplicación de las startups

En las afueras de Lausana, en Suiza, las empresas innovadoras en el campo de las ciencias de la vida atraen a los inversores

El Rolex Learning Center, en la Escuela Politécnica Federal de Lausana: el conocimiento equipa a empresas de base tecnológica

Trevor.Patt/ Flickr

Una región del oeste de Suiza que alberga universidades de investigación, hospitales y laboratorios de empresas ha ido adquiriendo protagonismo como polo de startups en el campo de las ciencias de la vida. En los alrededores de Lausana, la capital del cantón de Vaud, han surgido en los últimos años alrededor de mil empresas innovadoras, gran parte de ellas en áreas tales como oncología, biotecnología, medicina de precisión y nutrición, basadas en los conocimientos producidos por instituciones como la Escuela Politécnica Federal de Lausana (EPFL), el Instituto Ludwig de Investigaciones sobre el Cáncer o el Centro Hospitalario Universitario de Vaud (Chuv).

Ningún otro cantón, tal como se les denomina las 26 unidades de la Confederación Suiza, atrajo tanto al capital de riesgo en el pasado reciente como lo fue Vaud. Fueron 1.120 millones de francos suizos, el equivalente a 4.200 millones de reales, entre 2014 y 2017, según los datos de Innovaud, una plataforma creada por el gobierno en el 2013 para estimular la captación de capital de riesgo y proporcionarles infraestructura a las empresas. “Vaud se ha convertido en el corazón del valle suizo de la salud, que reúne a instituciones de investigación de nivel mundial y un clúster de empresas tecnológicas. Tenemos una nueva startup por semana”, dijo el bioingeniero Pierre-Jean Wipff, asesor de innovación de Innovaud.

TEDxLausanne El Neurocientífico Tej Tadi, de Mindmaze, crea interfaces hombre-máquinaTEDxLausanne

El caso más exitoso es el de Mindmaze, la primera startup del país en alcanzar un valor de mercado superior a mil millones de dólares antes de abrir capital, que trabaja con neurociencia y realidad virtual para crear interfaces hombre-máquina. Fue creado en 2012 por el ingeniero y neurocientífico indio Tej Tadi, de 38 años, quien se radicó en el país en el 2004 para hacer un doctorado en EPFL. La compañía, que emplea a 50 investigadores, ya obtuvo 110 millones de dólares en cinco estrategias de captura de capital de riesgo. Su primer producto fue el MindMotion Pro, un dispositivo que utiliza recursos de realidad virtual para acelerar la recuperación de pacientes que han sufrido un accidente cerebrovascular. El equipo crea programas de rehabilitación personalizados y facilita la interacción del usuario, con el apoyo de cámaras de captura de movimiento tridimensionales y programas de reconocimiento de objetos. Las ambiciones de la compañía se extienden hacia otros segmentos, como juegos y redes sociales: en el 2017, la Mindmaze lanzó Mask, una especie de visor que consigue capturar movimientos faciales y los mapea en un avatar de realidad virtual. Uno de los inversores de esta nueva iniciativa fue el actor estadounidense Leonardo Di Caprio.

El avance de las startups en Vaud se debe, en gran medida, a la tradición suiza de alojar empresas que producen tecnología en el campo de las ciencias de la vida –el 40% de las exportaciones del país proviene de la industria farmacéutica– y también a la interacción de las empresas con los conocimientos producidos en las universidades. “El ecosistema suizo de innovación siempre ha funcionado muy bien en esta área”, le explicó al periódico Le Temps, el analista de mercado Thomas Heimann, de la firma de inversiones HBM Healthcare. Aunque la sede de las compañías farmacéuticas se concentre en el norte del país, en la región de Basilea, varias multinacionales mantienen laboratorios de investigación y desarrollo (P&D) en las cercanías de Lausana, como en el caso de Merck, Novartis y Johnson & Johnson.

La capacidad de las empresas farmacéuticas y su interacción con las universidades crearon un ecosistema innovador

Con 20.000 investigadores y 4.000 estudiantes en las áreas de ciencias de la vida, el cantón de Vaud es famoso por atraer talentos externos. Con un área dos veces más grande que la ciudad de São Paulo, tiene 800.000 habitantes –el 30% son extranjeros–. Según Heimann, la habilidad creada en EPFL ayuda a explicar el impulso de las empresas innovadoras en el cantón. “Es una escuela orientada hacia la práctica y un terreno fértil para las startups, que han ganado impulso con la llegada de nuevos fondos de capital de riesgo a Suiza”, dijo. En el ranking del 2018 de las mejores universidades del mundo de la Times Higher Education, la EPFL, que cuenta con 10.000 estudiantes y casi 4.000 docentes, aparece en la 38º posición. La institución fue fundada en 1859, pero se transformó en una escuela federal, con estructura universitaria de investigación, en 1969. Mantenida por el gobierno suizo, se dedica a la transferencia de tecnología y cuenta con 245 startups creadas entre 2000 y 2017 como resultado de la investigación realizada en la institución. Las escuelas de Ciencias de la Vida, Ingeniería e Informática de la EPFL son las unidades más productivas en la generación de patentes –fueron 97 depósitos en 2017– y en empresas nuevas: 120 startups y 26 grandes empresas instaladas en el parque tecnológico de la Universidad, vecino a su campus. La EPFL también tiene tradición en colaboraciones con el sector privado. Sólo en 2018, los socios del sector industrial invirtieron en investigaciones en la institución en el valor de 34 millones de francos suizos, equivalente a 127 millones de reales.

Otra startup destacada en Lausana es ADC Therapeutics, que desde 2012 ha recaudado más de 455 millones de francos suizos, el equivalente a 1.700 millones de reales. Su enfoque es el desarrollo de ADC (antibody-drug conjugates), sustancias utilizadas para atacar tumores de una manera muy específica. La compañía utiliza anticuerpos monoclonales de antígenos tumorales que se conjugan a una clase de antibióticos para matar selectivamente a las células cancerosas. La compañía tiene seis ensayos clínicos en curso con pacientes con linfomas, leucemia y algunos tipos de tumores sólidos que ya no responden a los tratamientos convencionales. AstraZeneca, una empresa multinacional con sede en el Reino Unido, está invirtiendo en el ADC desde 2013. Según el CEO de la compañía, Chris Martin, el ecosistema de innovación de Lausana se ha convertido en un activo importante para la ADC, que se ha asociado con grupos de investigación de la EPFL y del Chuv.

C.Cianciaruso/ I.Keklikoglou/ EPFL Un consorcio de laboratorios en Lausana busca terapias personalizadas contra el cáncerC.Cianciaruso/ I.Keklikoglou/ EPFL

La ADC está instalada en el Biopôle, un campus de Ciencias de la Vida en el distrito de Épalinges, en Lausana, creado para estimular las colaboraciones entre grandes empresas, investigadores y emprendedores. El complejo, con 134.000 metros cuadrados, reúne a laboratorios de 25 grupos de investigación de universidades de la región, que trabajan en conjunto con una incubadora de startups con laboratorios multiusuario y un centro de bioinformática. Las instalaciones serán ampliadas hasta el 2021, agregándose 48.000 metros cuadrados de superficie construida, con dos edificios de oficinas y laboratorios, uno de ellos dedicado al Departamento de Medicina Personalizada del Chuv. También se construirán 9.000 metros cuadrados de laboratorios del Instituto Ludwig, que anticipa inversiones de 100 millones de dólares en la región para los próximos 10 años.

La presencia del Ludwig, una institución filantrópica estadounidense que administra un fondo de 1.200 millones de dólares, en Lausana, es antigua y se vio reforzada en 2013, al asociarse a EPFL y Chuv para crear el Suiss Cancer Center Léman, un consorcio dedicado a la creación de tratamientos personalizados contra el cáncer. Ubicarse en esa región no fue una casualidad: al menos 60 grupos de investigación oncológica se concentran en instituciones con sede en Vaud. Otra empresa que se mudará al Biopôle es la indiana Glenmark Pharmaceuticals, que transferirá 20% de sus técnicos e investigadores de la sede, localizada en el vecino cantón de Neuchâtel, hacia un centro de investigación traslacional en el campus de Lausana. La empresa, que inició sus actividades en la producción de medicamentos genéricos, se centra hoy en el desarrollo de fármacos contra el cáncer, las enfermedades respiratorias y las dermatológicas.

Biopôle En marzo fue inaugurado un centro de desarrollo de innovaciones digitales para la salud, en el complejo BiopôleBiopôle

Vaud no es un ejemplo aislado de concentración de startups en Suiza. Zúrich, en el nordeste del país, aloja cientos de empresas de tecnología de la información y la comunicación, impulsadas por la destreza de una gran escuela politécnica federal instalada en la ciudad. Esta vocación tuvo reflejos en los cantones vecinos, como el de Zug, de 23.000 habitantes, que alberga docenas de empresas de criptomonedas y de blockchain –registro de transacciones digitales con garantía de autenticidad–. “Se trata de un polo emergente de firmas financieras de alta tecnología, las fintechs”, dijo Philippe Praz, director del Swiss Business Hub Brasil, la oficina brasileña de un organismo vinculado a los Ministerios de Economía y de Asuntos Exteriores suizos, encargada de promover a las pequeñas y medianas empresas del país en el exterior. Praz dice que el mercado brasileño está en la mira de empresas de varias regiones de Suiza, como las que fabrican equipos médicos y odontológicos. Según él, las startups que operan en el mercado de drones también tienen interés en venderles sus productos a los agricultores del país. “En 2019, armaremos estands de empresas suizas para participar en ferias de estas áreas en Brasil”, dijo.

Con relación a las fintechs, el interés es de ambas partes. Praz cita ejemplos como la BitOne, startup fundada en Río de Janeiro que desarrolló tecnología para el uso de criptomonedas como forma de pago en el comercio electrónico. En 2017, fue una de las 15 empresas seleccionadas para participar en un Programa de Aceleración de fintechs en Zúrich, y hoy se estableció en Suiza, donde el mercado de criptomonedas está regulado. “En el 2018, organizamos una misión de fintechs en Suiza que contó con la participación de 25 startups brasileñas y tendremos una nueva misión ese año”, comentó Praz.

Abionic Abionic, una startup instalada en el cantón de Vaud, desarrolló un test rápido para detectar alergiasAbionic

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