Valter Campanato/ ABR
Pastizal seco en Minas Gerais: las lluvias y las sequías intensas se mantendrán durante los próximos añosValter Campanato/ ABREn los próximos años, el clima brasileño se mantendría invariable, con temperaturas promedio más elevadas en todo el país, lluvias más frecuentes y copiosas en el sur y sudeste, y sequías más asiduas e intensas en el norte y nordeste. “Todos los modelos [de simulación climática] indican que la tendencia de eventos climáticos extremos proseguiría”, comentó Tércio Ambrizzi, de la Universidad de São Paulo (USP), en abril, en el marco de una presentación de los resultados preliminares del primer informe nacional sobre cambios climáticos. El informe saldrá publicado en septiembre por el Panel Brasileño sobre el Cambio Climático (PBMC), similar al Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC). “No queríamos que el país llegase con las manos vacías a 2014, cuando el IPCC divulgará el próximo informe”, dijo Ambrizzi, uno de los coordinadores de dicho informe. “Ahora podemos detallar por bioma o por sectores aquello que el IPCC mencionaba Sudamérica”, comentó Eduardo Assad, de Embrapa, quien también fue coordinador del informe. Según Assad, la persistencia de temperaturas más elevadas y lluvias o sequías más intensas provocará un descenso en la productividad agrícola y en las áreas de plantación: “Debemos aumentar la productividad agrícola”. Las previsiones señalan que la Amazonia y el bosque atlántico se reducirán, con lo cual mermará el caudal de los ríos y la cantidad de agua disponible para los habitantes de los centros urbanos.
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