Hace 90 millones de años, vivió en un antiguo desierto situado en tierras que hoy pertenecen al noroeste del estado brasileño de Paraná un pequeño bípedo carnívoro de poco más de 1 metro (m) de largo y 11 kilos de peso, que exhibia una característica física amenazadora nunca antes registrada en otro dinosaurio: pies dotados de un par de garras en forma de lámina, con las que probablemente agarraba y laceraba a sus presas. El temible rasgo anatómico del Vespersaurus paranaensis, nombre de la nueva especie de dinosaurio, la primera encontrada en ese estado de la región sur del país, tenía una función análoga a las garras en forma de gancho de un famoso género de dinosaurios, el Velociraptor (Scientific Reports, 26 de junio). “A pesar de la similitud, el Vespersaurus no era un pariente cercano del Velociraptor”, dice el paleontólogo Max Langer, de la USP del campus de Ribeirão Preto, quien coordinó el estudio sobre los fósiles de la nueva especie, encontrados en la ciudad de Cruzeiro do Oeste. “Probablemente se alimentaba de lagartos y pterosaurios [reptiles alados], cuyos rastros fósiles también fueron encontrados en la región”. Las extremidades inferiores del Vespersaurus también indicaban otra característica peculiar de la especie. El animal caminó con prácticamente todo su peso apoyado en un único dedo, la falange más grande, de cada pie. De sus cuatro dedos, tres eran funcionales y uno, vestigial (atrofiado). El dedo funcional más grande, que produjo las marcas de sus huellas, estaba entre las dos garras. El Vespersaurus pertenece al gran grupo de terópodos, dinosaurios carnívoros que, además del Velociraptor, incluye el Tyrannosaurus. También firman el trabajo científico con la descripción de las nuevas especies, los investigadores de la Universidad Estadual de Maringá, del Museo de Paleontología de Cruzeiro do Oeste, del Museo Nacional, en Río de Janeiro, y del Museo Argentino de Ciencias Naturales.
Paulo Manzig
Reconstitución artística del Verspersaurus paranaensis Paulo Manzig