EDUARDO CESAR
A los 45 años, el físico alemán Klaus Capelle, quien asumió recientemente como rector de la Universidad Federal del ABC (UFABC), cuenta con una trayectoria poco común. Se graduó y obtuvo los títulos de magíster y de doctor en la Universidad de Wurzburgo, institución con sede en la pequeña ciudad homónima del norte de Baviera que tiene más de 600 años de historia y 14 premios Nobel en su currículo. Su tesina de maestría, de 1993, y su tesis doctoral, de 1997, ganaron en sus respectivas categorías el premio como mejor trabajo del año de la Facultad de Física y Astronomía de dicha universidad. Experto en física de la materia condensada y en química cuántica, Capelle tenía credenciales académicas como para desarrollar una trayectoria exitosa en su tierra natal.
Sin embargo, tan pronto como concluyó su doctorado, optó por una beca de estudios en un país tropical donde había pasado sus vacaciones en los años 1990. “La reputación de Brasil en Alemania era buena y yo sabía que la Universidad de São Paulo (USP) era una excelente universidad”, dice el físico. “Me pareció que sería un gran desafío ir a un país con una cultura distinta y una ciencia más joven do que la alemana”. Capelle desembarcó en el Instituto de Física de São Carlos (IFSC-USP) en 1997 con la idea inicial de hacer un posdoctorado bajo la supervisión del profesor Luiz Nunes de Oliveira y, al cabo de un año, regresar a Europa. Pero no fue eso lo que sucedió. Entre 1999 y 2003 fue becario del programa Joven Investigador de la FAPESP en el Instituto de Química de São Carlos de la USP. Durante ese período y los años siguientes pasó también temporadas como investigador visitante en las universidades de Misuri (EE.UU), Bristol (Inglaterra), Lund (Suecia) y Libre de Berlín.
“Podría haber regresado a Alemania o haberme ido a la Universidad de Bristol, pues me habían invitado, pero opté por quedarme en Brasil”, dice el físico, quien fue docente del IFSC entre 2003 y 2009. “En Europa estaría solamente puliendo un sistema ya estructurado, quizá trabajando en una universidad con una historia de cientos de años. Acá puedo ayudar a construir algo nuevo”. La capacidad de improvisar y de ser flexible ante las adversidades, cualidades normalmente asociadas a los investigadores brasileños, es uno de los rasgos nacionales que más entusiasman a Capelle, autor de más de 90 artículos publicados en revistas científicas y evaluador y miembro del consejo editorial de diversos periódicos.
El físico alemán tenía todo para hacer una larga carrera en el IFSC. Sin embargo, resolvió apostar a lo nuevo una vez más, en 2009. Dejó el puesto en la USP y obtuvo un cargo de profesor titular en la UFABC, una institución recién creada entonces en Santo André, en el ABC paulista, conurbación de São Paulo. En la UFABC, junto al trabajo como profesor e investigador, Capelle decidió desarrollar otra habilidad, la de gestor. De 2010 a enero de este año, ocupó el cargo de prorrector de Investigación de la universidad. En febrero tomó posesión como rector, cargo para el cual fuera electo en diciembre de 2013. “No soy rector, ocupo el cargo de rector”, afirma el físico, cuya mujer es brasileña, graduada como terapeuta ocupacional. “Es una experiencia gratificante. Como profesor, podía conseguir una beca para un alumno. Como prorrector, para 100. Como rector, la escala de los beneficios que puedo lograr para los estudiantes se vuelve mucho mayor.”
Republicar