La startup paulistana MVisia se especializa en sistemas de inteligencia artificial aplicados a la visión por computadora industrial. También en São Paulo, PPI-Multitask desarrolla plataformas de gestión de la producción a las cuales se las conoce como MES, las siglas en inglés de Manufacturing Execution Systems. El control accionario mayoritario de ambas empresas, que obtuvieron inversiones en el marco del Programa de Investigación Innovadora en Pequeñas Empresas (Pipe) de la FAPESP para el desarrollo de sus soluciones tecnológicas, fue adquirido recientemente por la multinacional brasileña Weg, una de las mayores fabricantes globales de motores eléctricos industriales y generadores de energía.
“La venta elevó a MVisia a otro nivel”, certifica Fernando Lopes, uno de sus socios fundadores. “Pasamos a disponer de una estructura comercial que nos hubiera llevado décadas lograrla. Teníamos pocos vendedores y ahora contamos con más de 300 en Brasil y en el exterior. Incluso logramos una primera venta en el estado de Pernambuco”, festeja.
Enfoque de la empresa
Sistemas de inteligencia artificial aplicados a la visión por computadora industrial
Fundación 2012
Proyectos Pipe aprobados 4
Empresa compradora Weg
Año de la transacción 2020
La empresa fue fundada en 2012 en el Centro de Innovación, Emprendimientos y Tecnología de la Universidad de São Paulo (Cietec-USP) y los cuatro socios estuvieron de acuerdo con la transferencia del 51% del capital a Weg en el pasado mes de junio. “Con este acuerdo también ganamos en materia de gobernanza, gestión y control financiero”, dice Lopes.
“¡Oh! Perfecto. Esa fue mi reacción al enterarme del interés de Weg”, recuerda Marcelo Pinto, uno de los tres socios directores de PPI-Multitask, fundada en 2000, que también le vendió el 51 % de su participación Weg en septiembre del año pasado. “Nuestra meta era ser protagonistas de la industria 4.0 en Brasil. Éramos conscientes de nuestras cualidades técnicas, pero también de las limitaciones financieras y operativas. La multinacional Weg posee solidez financiera, capacidad de venta, gestión calificada y el mismo objetivo de ser competente en la industria 4.0”, argumenta.
El interés de las grandes corporaciones por la adquisición de empresas de base tecnológica como las que respalda el programa Pipe-FAPESP no es una novedad. En 2005, el conglomerado aeroespacial francés Thales adquirió la fábrica de instrumental para satélites y radares Omnisys, con sede en la localidad paulista de São Bernardo do Campo. En 2011, la empresa brasileña de aeronáutica Embraer adquirió la firma paulistana Atech, que se dedica a la gestión y el control del tráfico aéreo civil y militar, y también Bradar (antes denominada Orbisat), empresa especializada en el desarrollo de sistemas y sensores electrónicos, tales como radares de defensa para monitoreo terrestre y aéreo.
Cinco años después, la brasileña Akaer, proveedora de sistemas y componentes aeroespaciales, incorporó a Opto Eletrônica, de la ciudad de São Carlos, empresa especializada en tecnología optoelectrónica, como en el caso de las cámaras de uso espacial. En 2017, la empresa, cuya sede se encuentra en São José dos Campos, y que participó en el proyecto del jet militar Gripen (lea en Pesquisa FAPESP, edición nº 282), adquirió el control de la firma Equatorial Sistemas, que desarrolla soluciones tecnológicas para sistemas espaciales, de defensa y seguridad.
Cuando se observa el ecosistema de startups del país, se advierte que el cambio de comando en las empresas es amplio y viene sucediendo a un ritmo creciente. Entre enero y septiembre de este año, al menos 100 startups negociaron su control total o parcial en Brasil, según estimaciones de la plataforma Distrito, de apoyo a la innovación. En todo 2019, esa cifra había sido de 63 startups.
Enfoque de la empresa
Automatización industrial, sistemas de gestión de la producción (MES) y soluciones en internet de las cosas (IoT)
Fundación 2000
Proyectos Pipe aprobados 1
Empresa compradora Weg
Año de la transacción 2019
En los casos de PPI-Multitask y MVisia, ambas conservaron sus marcas, equipos y sedes en São Paulo. Los socios fundadores se mantienen al mando del funcionamiento diario de sus respectivas empresas. Lo que cambió en la estructura organizativa es la presencia de un representante de Weg en el consejo de ambas empresas y la necesidad de alinearse a la estrategia corporativa de la multinacional. “Ellos no coparon PPI-Multitask. Nosotros conservamos nuestra independencia operativa, y las decisiones a largo plazo son el resultado de un sistema de dirección participativo, donde tenemos voz”, subraya Pinto.
La decisión de Weg con la adquisición de PPI-Multitask y MVisia en menos de un año tuvo como objetivo acelerar el desarrollo de la división de negocios digitales de la compañía, creado hace un año. La multinacional también adquirió otras dos pequeñas empresas de base tecnológica con la misma finalidad: la paulistana V2COM, especializada en conectividad e internet de las cosas (IoT), y BirminD, de la ciudad de Sorocaba (São Paulo), que actúa en el mercado de la inteligencia artificial aplicada al análisis de datos industriales.
“Son empresas que complementan nuestra cartera de soluciones digitales con tecnologías maduras y probadas”, reconoce Carlos Bastos Grillo, director de negocios digitales de Weg, cuya sede se encuentra en la localidad de Jaraguá do Sul, en el estado de Santa Catarina. “El intercambio de conocimientos y recursos entre Weg y esas cuatro empresas genera nuevas oportunidades de innovación y una oferta de soluciones más completas para los clientes”.
Los expertos en innovación estiman que la fusión, adquisición y otras formas de interacción entre empresas grandes y firmas jóvenes e innovadoras son situaciones que se volverán cada vez más habituales en Brasil, a semejanza de lo que ya ocurre asiduamente en Estados Unidos. Y esta es una buena noticia. “Es importante que el emprendedor disponga de diversas oportunidades de obtener un beneficio por su esfuerzo, ya sea financiero o de otro tipo. Esto afianza el ecosistema de innovación”, enfatiza la ingeniera de alimentos Luciana Hashiba, vicecoordinadora del Centro de Innovación de la Escuela de Administración de Empresas de São Paulo de la Fundación Getulio Vargas (FGV-Eaesp).
Para el ingeniero químico Américo Craveiro, miembro de la coordinación adjunta del área de Investigación para la Innovación de la Dirección Científica de la FAPESP, el interés de los grandes grupos en las pequeñas empresas innovadoras debe apreciarse como una dimensión del éxito del Pipe. “Eso significa que el emprendedor al que se lo respaldó dio cumplimiento al desafío técnico estipulado y validó su propuesta”, afirma.
Ambos ingenieros, Craveiro y Hashiba, quien también integra la coordinación adjunta, consideran como algo secundario el hecho de que el producto desarrollado con la ayuda del programa público de fomento a la innovación no sea comercializado por el mentor sino por terceros, o incluso si la empresa fuera vendida. Lo que importa es que el esfuerzo no se desvanezca en el arduo camino de transformar una idea en un emprendimiento exitoso”, pondera Hashiba. “Lo que cuenta es el resultado final. El apoyo a la tecnología debe generar un valor para la sociedad y asegurar el retorno económico y social de la inversión”, sostiene Craveiro.
Según César Costa, socio director de la consultora en emprendimientos e innovación corporativa Semente Negócios, lo que impulsa a las grandes corporaciones a adquirir startups es la decisión de acelerar alguna estrategia de la empresa. “Podría ser acceder a nuevos mercados, diversificar su catálogo de productos, incorporar nuevas tecnologías o incluso captar talentos”, analiza.
En un proceso de adquisición tradicional, lo que está en juego en la mayoría de los casos es la participación de mercado, un producto exitoso o la estructura física de la empresa adquirida. En una startup, generalmente, el principal activo es la capacidad innovadora de los emprendedores.
El interés de las grandes corporaciones por las pequeñas empresas innovadoras debe tomarse como una medida del éxito del Pipe
Cuando se adquiere una empresa innovadora joven, analiza Costa, uno de los grandes retos consiste en mantener el conocimiento y el vigor de sus fundadores. “En el propio contrato de venta suelen incluirse cláusulas que estipulan que los emprendedores continuarán trabajando en la startup durante un tiempo, evitando que su salida impacte negativamente en el funcionamiento del negocio”, informa el consultor.
El ingeniero de producción Eduardo Zancul, de la Escuela Politécnica (Poli) de la USP y también miembro de la coordinación adjunta de la FAPESP, hace hincapié en las dificultades que afronta una empresa pequeña para afianzarse. “Una crisis muy severa o modificaciones en los parámetros competitivos pueden afectarla o incluso comprometer su supervivencia. Las empresas pequeñas son frágiles e inestables”, dice.
Esta afirmación se aplica todavía más en un país como Brasil, donde el crédito privado históricamente es caro y la variación anual del crecimiento económico es abrupta, lo cual dificulta la planificación empresarial. En las últimas décadas, el país vivió 10 años de crecimiento moderado, registrándose seis años de una evolución significativa de la economía, de un 4 % o más, alternados con otros cuatro años de recesión: 2009, 2015, 2016 y ahora este primer semestre de 2020, de acuerdo con los cálculos anuales del Producto Interno Bruto (PIB) del Instituto Brasileño de Geografía y Estadística (IBGE). Para el año en curso, el Instituto de Investigación Económica Aplicada (Ipea) proyecta una contracción de un 5% en el PIB.
“Las empresas procuran crecer para ganar solidez. El crecimiento demanda capital, conocimiento, acceso a la distribución y clientes. Una pequeña empresa, por sí sola y con sus propios medios, tarda en lograr esa solidez”, dice Zancul. Las alternativas para acelerar ese proceso son escasas, evalúa el investigador. Una de ellas es que el pequeño empresario se aboque a la búsqueda de inversores. Otra es la fusión con otras pequeñas empresas, tratando de conformar un negocio mayor. La tercera es la venta. “La adquisición por otro grupo empresario también puede ser un camino para que la pequeña empresa crezca”.
Enfoque de la empresa
Fertilización in vitro de embriones bovinos
Fundación 2002
Proyectos Pipe aprobados 4
Empresa compradora ABS Global
Año de la transacción 2015
Éxito en el campo de la fertilización
En el año 2002, en Mogi Mirim, una localidad del interior del estado de São Paulo, fue fundada la empresa InVitro Brasil (IVB), que ha logrado un expresivo éxito de mercado. Antes de ser vendida en 2015 a la empresa de genética ABS Global, del grupo estadounidense Genus, ya era la mayor empresa de fertilización in vitro de embriones bovinos del mundo –en 2013 fue responsable del 45 % de la producción global de embriones– y una referencia en la metodología de criopreservación, el congelamiento de embriones, un desarrollo tecnológico realizado con la ayuda del Pipe (lea en Pesquisa FAPESP, edición nº 231).
“Éramos los líderes en fertilización in vitro de embriones; no obstante, en comparación con las grandes empresas del área de la genética, éramos demasiado pequeños como para competir solos en el mercado de la reproducción”, explica el veterinario José Henrique Pontes, socio fundador de IVB y actualmente director global de Estrategia de Embriones de ABS.
Según él, la capacidad de inversión en investigación de Genus fue un factor crucial para decidir su venta. “El grupo invierte más de 50 millones de dólares anuales en investigación y una parte significativa se destina a la biotecnología y fertilización in vitro”, resalta. Hasta la adquisición de IVB, ABS Global era una empresa especializada en inseminación artificial mediante una técnica avanzada de separación del semen por sexo, lo que le permitía al criador la elección del sexo del animal.
“La compra de una empresa de embriones como IVB era el eslabón que nos faltaba para disponer de una cartera completa”, relata Márcio Nery, director general de ABS Brasil. “La tecnología de embriones congelados es el futuro y resultó decisiva para el interés del grupo por IVB”. ABS posee seis laboratorios en Estados Unidos, uno en México y tres en Brasil. Los técnicos brasileños, según Nery, son los responsables de los proyectos experimentales internacionales en laboratorio de embriones. “Tenemos equipos realizando trabajos en Rusia, en Vietnam y en Chile. Quizá también comencemos a operar en la India”, informa. Los técnicos en embriones brasileños suman en ABS 120 personas, el doble del equipo original de IVB en 2015.
Para el consultor César Costa, de la empresa Semente Negócios, una práctica habitual del mercado es la adquisición parcial de startups, conservando el interés de los emprendedores originales en el éxito de la empresa y estableciendo modelos de gestión que permitan autonomía en la toma de decisiones. Con frecuencia, el administrador de la startup responde directamente al CEO o al consejo directivo del nuevo controlador.
Enfoque de la empresa
Análisis de datos y soluciones de movilidad urbana
Fundación 2014
Proyectos Pipe aprobados 3
Empresa compradora green4T
Año de la transacción 2019
Esto fue lo que sucedió con la paulistana Scipopulis, una startup especializada en análisis de datos y soluciones de movilidad urbana adquirida por la firma green4T en 2019. “No deseábamos transformar a Scipopulis en green4T, sino mantener la cultura innovadora de ellos”, dice Eduardo Marini, CEO de green4T, una empresa brasileña de soluciones tecnológicas e infraestructura digital con sede en São Paulo. “En una de las primeras rondas de negociación hicimos hincapié en garantizar que ellos conservarían la marca e independencia operativa. No habría un jefe externo impartiendo órdenes”, recuerda Marini, quien subraya que otra de las preocupaciones fue establecer un ambiente propicio para la recepción del nuevo equipo, integrado por 10 personas.
“Teníamos, eso sí, cierto temor a convertirnos en burócratas que cumplían órdenes. Lo que definió el negocio fue la alineación de los propósitos”, reconoce Roberto Speicys, uno de los cuatro socios fundadores de Scipopulis. El acuerdo contempló la incorporación de la startup y que los fundadores de la empresa pasaban a tener acciones de green4T, manteniendo a Speicys como CEO de Scipopulis. Todos los fundadores de la startup estuvieron de acuerdo con la negociación, pero dos prefirieron dedicarse al desarrollo de nuevos emprendimientos.
Para Marini, la adquisición de Scipopulis fue una oportunidad para que green4T ampliara su cartera de soluciones que ofrece a las ciudades. La startup fue creada en 2014 y la ayuda del Pipe fue fundamental para el desarrollo de dos soluciones: la aplicación Coletivo, que brinda a los usuarios información en tiempo real sobre los ómnibus y la red del transporte público, y el panel web Trancity, de seguimiento y gestión de las flotas de autobuses, dirigido a los gestores de flotas y administradores municipales.
Por el momento, estas soluciones solo están disponibles en la ciudad de São Paulo. “Una startup se topa con dificultades para participar en licitaciones públicas y negociar con los administradores municipales. Pero green4T posee experiencia en este proceso”, reconoce Speicys. La plataforma Trancity ya se emplea en Belo Horizonte, Río de Janeiro, Teresina, Fortaleza y en la ciudad de Santiago, en Chile. Las nuevas perspectivas no están circunscritas al sector del transporte. “Nuestro negocio es el desarrollo de soluciones tecnológicas con base en el análisis de datos. Hemos explorado posibilidades en el área de la salud, seguridad pública y otras aplicaciones en movilidad urbana”, adelanta Speicys. “Sin duda, pasar a formar parte de la cartera de green4T nos permitirá acelerar esos nuevos proyectos”.
Proyectos
1. Estudio de factibilidad técnico-científica de un sistema de visión por computadora para la clasificación de plantines con flores y plantas ornamentales (nº 12/50974-9); Modalidad Investigación Innovadora en Pequeñas Empresas (Pipe); Investigador responsable Luiz Otávio Lamardo Alves Silva (MVisia); Inversión R$ 61.818,93.
2. Desarrollo de una máquina para la inspección y el control de calidad de plantines forestales (nº 15/08706-5); Modalidad Investigación Innovadora en Pequeñas Empresas (Pipe); Convenio Finep Pipe/Pappe Subvención; Investigador responsable Fernando Antonio Torres Velloso da Silva Neto (MVisia); Inversión R$ 306.930,85.
3. Desarrollo de una máquina basada en visión por computadora para la selección de plantines prebrotados de caña de azúcar (nº 17/07731-1); Modalidad Investigación Innovadora en Pequeñas Empresas (Pipe); Convênio Finep Pipe/Pappe Subvención; Investigador responsable Fernando Paes Lopes (MVisia); Inversión R$ 231.763,32.
4. Estudio de factibilidad técnica de un sistema de visión por computadora empotrado para la detección de carcazas de pollos con posible contaminación (nº 18/13213-6); Modalidad Investigación en eScience y Data Science (Pipe); Investigador responsable Fernando Antonio Torres Velloso da Silva Neto (MVisia); Inversión R$ 52.683,80.
5. Desarrollo de un sistema MES (Manufacturing Execution System) de apoyo a las industrias en la atención de las nuevas demandas de la industria 4.0 (nº 17/00959-7); Modalidad Investigación Innovadora en Pequeñas Empresas (Pipe); Investigador responsable Claudio Vinicius Buonamici (PPI-Multitask); Inversión R$ 367.333,80.
6. Utilización de la espectrometría de masas para el control de calidad de medios de cultivo y del suero fetal vacuno utilizado para la reproducción in vitro de embriones bovinos (nº 07/01400-1); Modalidad Investigación Innovadora en Pequeñas Empresas (Pipe); Investigadora responsable Christina Ramires Ferreira (InVitro Brasil); Inversión R$ 130.529,18.
7. Desarrollo de herramientas genómicas para la selección de vacas con referencia mundial en producción (nº 12/51067-5); Modalidad Investigación Innovadora en Pequeñas Empresas (Pipe); Investigadora responsable Andrea Cristina Basso (InVitro Brasil); Inversión R$ 236.162,20.
8. Validación de biopsias y amplificación del ADN de embriones bovinos producidos in vitro para su análisis genómico global (nº 14/50616-0); Modalidad Investigación Innovadora en Pequeñas Empresas (Pipe); Investigadora responsable Andrea Cristina Basso (InVitro Brasil); Inversión R$ 125.163,46.
9. Estandarización y validación de PCR en tiempo real para la certificación sanitaria de embriones bovinos producidos in vitro (nº 14/50169-4); Modalidad Investigación Innovadora en Pequeñas Empresas (Pipe); Investigadora responsable Juliana Hayashi Tannura (InVitro Brasil); Inversión R$ 114.622,70.
10. Una aplicación móvil para la obtención de información actualizada del transporte público basada en el conocimiento colectivo (nº 13/50812-1); Modalidad Investigación Innovadora en Pequeñas Empresas (Pipe); Investigador responsable Roberto Speicys Cardoso (Scipopulis); Inversión R$ 468.892,75.
11. Desarrollo de una aplicación móvil colaborativa de información sobre el transporte público en tiempo real y su respectivo sistema de análisis de datos (nº 15/50343-7). Modalidad Investigación Innovadora en Pequeñas Empresas (Pipe); Investigador responsable Roberto Speicys Cardoso (Scipopulis); Inversión R$ 778.840,10.
12. Una plataforma de información sobre el transporte en tiempo real basada en el conocimiento colectivo (nº 15/50572-6). Modalidad Investigación Innovadora en Pequeñas Empresas (Pipe); Investigador responsable Márcio Calixto Cabral (Scipopulis) Inversión R$ 479.175,47.