Instituto Wyss / Universidad HarvardCientíficos de la Universidad Harvard y del Instituto de Tecnología de Massachusetts (MIT), ambos en Estados Unidos, diseñaron un biosensor para detectar el nuevo coronavirus que puede incorporarse en máscaras e indumentaria. El sensor utiliza una serie de compuestos deshidratados que intervienen en las reacciones químicas características de los organismos vivos. Cuando este material entra en contacto con el agua, comienzan las reacciones y detectan el material genético del virus. El sensor puede adaptarse para producir diversos tipos de señales, tales como un cambio de color, visible a simple vista, o una emisión de luz que puede medirse con dispositivos específicos. Uno de los prototipos desarrollados por el grupo es una máscara que posee un biosensor en su cara interna, que detecta la presencia del virus en el aire exhalado por el usuario, y otro en su cara externa, para detectar la exposición al patógeno en el ambiente. La máscara posee un depósito de agua que se activa en el momento de la prueba. El resultado está listo en 90 minutos (Nature Biotechnology, 28 de junio). “Este detector es tan sensible como el patrón oro, el test de PCR, y tan rápido como las pruebas de detección de antígenos”, dice Peter Nguyen, investigador de Harvard.
