Los incendios forestales no generan solamente un gran impacto ambiental: también afectan al sistema de salud pública. Un estudio reciente ha detectado un aumento de la cantidad de internaciones como consecuencia de los problemas respiratorios y circulatorios asociados a la inhalación de partículas generadas por la combustión de la biomasa. El investigador Weeberb Réquia, de la Fundación Getulio Vargas en Brasilia, junto a colaboradores de Estados Unidos, analizaron más de dos millones de casos de personas hospitalizadas con afecciones cardiorrespiratorias registrados en todo el territorio brasileño entre 2008 y 2018 y constataron la existencia de una correlación entre las quemas y las enfermedades que padece la población. En promedio, las temporadas de incendios forestales en Brasil fueron vinculadas a un aumento de un 23 % en el número de internaciones por problemas respiratorios y de un 21 % debido a enfermedades del sistema circulatorio. En la región norte del país, el incremento de las hospitalizaciones por enfermedades del tracto respiratorio fue de un 38 % y de un 27 % para las afecciones del sistema circulatorio (Nature Communications, 12 de noviembre). Según expresaron los investigadores, incluso los pequeños incendios exponen a la población a un mayor riesgo de internaciones debido a la aparición de enfermedades cardiorrespiratorias.
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Más incendios de bosques, más internaciones
Un incendio en la zona de Chapada dos Veadeiros, en el estado de Goiás: el Cerrado es un bioma sujeto a la acción del fuego
Valter Campanato/Agência Brasil
